domingo, 3 de junio de 2018

EXCURSIÓN FIN DE CURSO - SIGÜENZA MEDIEVAL - guadahumi2


EXCURSIÓN FIN DE CURSO - SIGÜENZA MEDIEVAL - guadahumi2

24 DE MAYO 2018



CASTILLO DE SIGÜENZA - GUADALAJARA

La visita cultura la comenzamos en el Castillo de Sigüenza, donde nos explicaron la historia de esa ciudad y el urbanismo en la Edad Media.





La época de construcción fue durane el reino de taifas de al-Ándalus, reconstruido S-XIX y en el año 1972 por Bernardo de Agén,  en piedra de sillas y un perímetro 400 m. En la actualidad alberga el Parador Nacional de Turismo, el castillo fortaleza estuvo involucrado conflictos bélicos como la guerra de Sucesión, Tercera Guerra Carlista



El castillo de los Obispos de Sigüenza es un palacio-fortaleza, erigido en el primer cuarto del siglo XII sobre otro anterior musulmán de comienzos del siglo VIII. Fue habitual residencia de los obispos seguntinos hasta mediados del siglo XIX. Ha sido reformado en los siglos XIV, XV, XVI y XVIII. Sufrió destrozos a comienzos del siglo XIX (el año 1811) por la invasión francesa, durante las guerras carlistas, y en el siglo XX, durante la guerra civil española del 36 al 39. Todo ello obligó a realizar una restauración casi total siguiendo los planos y documentos antiguos. Es Parador Nacional de Turismo desde 1972.








Los musulmanes levantaron un primer castillo o alcazaba, hasta que fue conquistado para el Reino de Castilla​ definitivamente en 1124, a los almorávides, por las mesnadas del arzobispo de Toledo Bernardo de Agén (c.1080-1152),3​ de la Orden de Cluny, reinando en Castilla Doña Urraca, hija de Afonso VI, el que tomó Toledo, y madre de Alfonso VII, de la casa de Borgoña, llamado El Emperador. Desde entonces fue propiedad y feudo de los obispos de Sigüenza.


En 1298 sufrió el asalto por sorpresa de los partidarios del Infante Alfonso de la Cerda (1270-1333), aspirante al trono de Castilla, en la guerra que había en Castilla contra el rey niño Fernando IV (1285-1312). Estos asaltantes fueron desalojados por los vasallos del obispo García Martínez​ tras quemar las puertas del castillo mediante una cuba llena de tocino.

A principios del siglo XIV el obispo Simón Girón de Cisneros​ levantó la nueva puerta defendida por dos torres gemelas que da a la parte de la ciudad, y en 1355 Pedro I de Castilla se apoderó del castillo desterrando a su obispo, D. Pedro Gómez Barroso,7​ y encarcelando en una torre a su esposa, Doña Blanca de Borbón (1339-1361) para evitar que sirviera de apoyo a los nobles que querían deponerle del trono. Cuatro años permaneció confinada Doña Blanca en este castillo (1355-1359).

Durante el siglo XV sirvió de refugio contra las razias efectuadas por los navarros, durante la guerra de los Infantes de Aragón.​ El obispo Fernando Luján (1449-1465) mandó por entonces que todos los habitantes de Sigüenza acudieran armados a las murallas ante el toque de campana, so pena de la confiscación de sus bienes. A la muerte de Luján, en 1465, Diego López de Madrid fue elegido obispo sin la aprobación papal, y se hizo fuerte en el castillo. Aunque el papa no le reconoció en el cargo, resistió allí durante tres años, al cabo de los cuales la fortaleza no fue tomada por las armas sino por la traición de un criado. Le sucedió el gran Cardenal Mendoza (1428-1495), que siendo primero obispo de Sigüenza, mandó levantar la gran barbacana (o antemuro) que defiende las puertas y transformó la fortaleza en un palacio.





se decidió reconstruirlo como parador de turismo (1972).​


En los siglos sucesivos el castillo fue muy ampliado y modificado con edificaciones palaciegas de carácter civil como el llamado Salón del Trono y otras, abriéndose grandes ventanas y balcones. A finales del siglo XVIII el obispo Juan Díaz de la Guerra (1777-1800) acentuó el carácter residencial del castillo, creando oficinas y viviendas para funcionarios. Ha sido residencia de casi todos los reyes de Castilla a su paso por el lugar.


En 1710, durante la Guerra de Sucesión (1701-1713) fue Cuartel general del Archiduque Carlos de Austria, pretendiente a la Corona de España. Partidarios de austrias y de borbones se alternaron en la posesión del castillo sin que éste sufriera daños. Últimamente y con las sucesivas obras, tenía más carácter de gran edificio civil que de castillo guerrero.
En 1808, durante la ocupación napoleónica (1808-1814) el castillo es usado como cuartel de las tropas francesas, que lo dañaron seriamente y saquearon todas sus riquezas. El hostigamiento de Juan Martín el Empecinado les obligaría a abandonarlo momentáneamente, para volver a ocuparlo en 1811.

En 1827 vuelve a ser residencia de los obispos, y acoge al rey Fernando VII y su séquito cuando volvían del balneario de Solán de Cabras, donde buscaban la solución a la esterilidad de la reina María Josefa Amalia, que también buscaron en la ciudad de Sigüenza pidiendo la protección de Santa Librada.


Precisamente aquel rey está en el origen de las guerras carlistas (1833-1876) cuando el castillo sirvió de nuevo como fortaleza por última vez, sufriendo grandes destrozos hasta el punto de ser abandonado por los obispos como residencia.






Castillo se restauró en el s-XIX tras el abandono a lo largo de la guerra de la independencia, estos edificios se encontraban en sitios estratégicos y tuvo mucho movimiento en las guerras carlistas y todos estos avatares llevaron que al s-XIX el Castillo de Sigüenza era unas ruinas.


Cuando llegó el plan de paradores nacionales ese edificio se destinó a ese menester, este edificio está reconstruido en la década de los 50/60 con la colaboración de expertos en la historia del arte junto al Ministerio de Cultura se llevó a cabo la reconstrucción respetando unos criterios, pero se reconstruye sobre lo que había y no era el castillo original que en esa época eran fortalezas medievales desde el s-XI al s-XIII se mantuvieron ese tipo de construcciones habiendo un cambio en el s-XVI transformándose los castillos feudales en Castillos-Palacio haciéndose estructuras palaciegas.

El Cardenal Mendoza, Obispo de Sigüenza comenzó las obras finales del s-XV y el Cardenal Cisneros cuando era canónigo en Sigüenza continuaría con las obras varios años,  en la cumbre de la ladera estaba la fortaleza de la Edad Media que se convertiría una residencia para el Señor de Sigüenza.

El origen de la actual Sigüenza ha tenido diferentes modificaciones y en los últimos años han cambiado radicalmente al uso que tradicionalmente se daba en el origen de la Sigüenza Medieval, tradicionalmente se tenía una visión que arrancaba del s-XVI que todas las ciudades importantes usaban un sistema geográfico y que se interrelacionaba con la historia de la población de todas las épocas renacentista, etc.

Cuando se tomaron las ciudades de Castilla, Aragón, etc. existen escritos de cronistas que explican cómo se hacía y en las fuentes pero con  una visión poco científica y lo hay es una serie de tradiciones que justifican esas actuaciones, eso ocurría en todas las ciudades, Toledo, Sevilla, Madrid, Guadalajara, etc. en ese momento también surgió la historia de Sigüenza.

A Sigüenza se la hizo conciliar y intereses historiográficos de tradición se recogen en fuentes que se encuentran en el archivo catedralicio, es decir en el archivo de la Catedral, dicen las crónicas que Cuenca fue conquistada no indicando la fecha exacta, pero aprox. en el año 1177 por su primer obispo, esa ciudad conquistada de cultura islámica transformándola en una ciudad cristiana.

Los historiadores de Sigüenza y otros discuten si era en 1121, 22, 23, pero lo único cierto era partir de la conquista y Sigüenza en la tradición local cuenta que en principio era una Ciudad Celtibérica, tuvo una romanización tras ser ocupada según fuentes documentadas por obispos que acudían a los concilios en Toledo y desde allí vendrían a Sigüenza en el proceso de la reconquista.

Hubo una serie de investigaciones archivistas que trabajan de una manera se tuvo que hacer una relectura por completo de toda la documentación que existe sobre la reconquista conservada desde el año 1082 en la que se estabilizan los hijos de Fernando I, Alfonso VI en Castilla y León emprendiendo la expansión cristiana, en esos documentos se llaga a la conclusión de que no se conquistó  Sigüenza por no haber nada que conquistar pues no era una ciudad, sino que era una pequeña aldea y no aparece en las fuentes, y cuando aparece ya es un periodo muy avanzado en s-XII y que empieza a ser comprobada por las excavaciones arqueológicas.

Desde el cerro de Villavieja donde se ubica el castillo, hasta el cauce del río Henares; se aterraza el núcleo urbano. Núcleo urbano que ha ido evolucionado desde la ciudadela visigoda asentada sobre restos romanos a la planificación de los musulmanes que vivieron aquí hasta el s. XII y sobre todo al urbanismo medieval pos-reconquista.

Se pone de manifiesto que es cierto que Sigüenza fue un castro celtibérico y ese asentamiento estaba originariamente en el cerro Villa Viejas, y en la expansión fue posible que se bajaran del cerro a zonas de la Alameda.

Es cierto que hubo obispos en época visigoda que participaron,  pero que se pierde la memoria en el arzobispado de Sigüenza en el s-VIII y hasta finales del s-XI hay una descomposición por completo por toda la zona castellana siendo un caso general, y los  musulmanes reconstruirán el territorio de forma diferente y en todo el alto Henares y alto Jalón desarrollan dos puntos que sustituyen a las estructuras anteriores Medinaceli y Atienza, y Sigüenza en la época  de la conquista era una aldea pequeña y que las jurisdicciones de Medinaceli estaban  a Alagosa cerca del río Dulce.

La relación musulmana con la llegada de los almorávides a la península después de la Batalla de Sagrajas hubo un momento en el que esas tierras se convierten en tierras de frontera  con muy pocos recursos para  hacer la repoblación cristiana se comienzan a poblar los puntos defensivos importantes como Atienza, Medinaceli, que se conquistó en 1804, conquistando también Guadalajara, Hita, aquellas ciudades que eran las cabezas territoriales para articular la administración del os territorio y defenderlos. Sigüenza era una aldea y eso supuso que aprox. 1804 esos territorios  en 1122 se restaura la diócesis de Sigüenza eso se encuentra en las fuentes,  documentación y avalada por la excavaciones arqueológicas actuales indican que no quedaba nasa de Sigüenza  que una ciudad abandonada en la que existía  una pequeña aldea.

Hay un factor político fundamental a la muerte de Alfonso VI en el verano 1109 se desarrolla la Batalla de Uclés  en 1108 entre las tropas cristianas de Alfonso VI de León y las almorávides de Alí ibn Yusuf, y se saldó con la derrota de los cristianos, pues querían recuperar toda La Macha, la frontera del Tajo entre Uclés y Belinchón y la Zona de Zorita, Almoguera, Guadalajara y todo el valle del Henares pero en esa batalla muere del heredero de la corona de Castilla Sancho y a la muerte del rey entre esos meses se busca una solución política con Urraca que es viuda y tiene un hijo y el rey opta por que se case con el rey más célebre de la época, pero es una solución política muy complicada, porque al tener un hijo de la reina en el pacto matrimonial que tendría que heredar las dos coronas, pero debería heredar la corona de Aragón el hijo del matrimonio para heredar los derechos el hijo primogénito del a reina, pero también hay un problema jurídico y es que hay un grado de familiaridad de los contrayentes que son primos pero canonicamente el matrimonio es invalido, y además hay otro problema y es que hay una incompatibilidad personal entre Alfonso I el Mayor de Aragón y la infanta Urraca, todo eso genera un problema en las relaciones político económicas espantosas en que el reino queda dividido en dos bandos los partidarios de la reina, partidarios del rey y los partidarios del hijo del primer matrimonio y que será al final el partido ganador, abriéndose un periodo de guerra civil permanente, y en ese contexto las fuerzas tratan de controlar el asunto, pero en un primer momento el rey e impone a la fuerza, expulsa al arzobispo de Toledo, lo encarcela y pide ayuda al Papa, y esa política sin futuro y como el arzobispo de Toledo era de origen francés era más partidario de la reina que era hija del rey Felipe IV de Borgoña y prácticamente desde 1518 la zona ya es controlada por los partidarios de la reina de Aragón que sigue controlando toda la Sierra, el Duero el hasta el Tajo llegando a Extremadura.

De manera que le reino de Aragón controla Segovia, etc. siguieron los enfrentamientos quedando en empate y en ese contexto que es en el que el hijo de la reina y cuyos partidarios habían pactado con ella que su hijo heredaría a su muerte durante un tiempo cogobernaron y el arzobispo de Toledo puso en marcha un movimiento político para frenar el avance del rey de Aragón cambiando la estructura eclesiástica y cuando se confisca el territorio de la hoy Sigüenza al ser arzobispo de Toledo y Primado de España en un pacto con Alfonso VI ya con una nueva estructura del a Iglesia de España y dentro de la política el arzobispo no restaura algo que se venía haciendo en la época de la reconquista que era que cuando se conquistaba un territorio en 1086 decide que no se va a restaurar la diócesis, y que se mantendrá un territorio de archidiócesis con lo cual no se restauran ni la diócesis de Ávila, Soria, Cuenca, y si se restauró en esos momentos Osma que con la que entraría en conflicto con ese obispado.

Con todos esos avatares por el control de territorio tanto Alfonso VI hijo de la reina como el arzobispo de Toledo Bernardo deciden que para frenar la expansión del rey de Aragón que está haciendo sobre el reino castellano trató me introducir la política del rey de Aragón para controlar ese territorio militarmente, pero también de manera administrativa.
Don Bernardo de Agen, obispo de Sigüenza desde 1121, en que se restituyó la sede episcopal, reconquista la ciudad en 1123 y se aloja en los restos de la iglesia de los Huertos, reedificándola y amurallándola.

El 7 de mayo de 1146, Alfonso VII concederá a Don Bernardo el señorío sobre la Sigüenza superior y su castillo. A partir de entonces, el burgo superior y el inferior son una misma villa, un mismo concejo y tiene un mismo juez.

Su sucesor en el pontificado será don Pedro de Leucata, el impulsor de la obra de una catedral fortificada a medio camino entre las dos Sigüenzas, en su actual emplazamiento.
Hacia ella se acercan los habitantes de la parte inferior, quedando ésta totalmente despoblada en el siglo XIII.

Así pues, en el siglo XII existen dos núcleos de población, unos en torno a la alcazaba y en otro en torno a la catedral.

Para combatir los intereses de Castilla y León el arzobispo de Toledo restaura la otra archidiócesis de la antigua España que estaba en Tarragona, y para  contar con la ayuda del papado consiguió la restauración, y desde la archidiócesis de Tarragona restauran todas las demás, y el reino de Castilla es una antigua archidiócesis de Tarragona, restaurándose inmediatamente la archidiócesis de Tarazona y adscribir todos los territorios y de esa manera Aragón consigue evitar enfrentamientos ante ese movimiento y la relación de Alfonso VI y el arzobispo de Toledo fuera cordial y en investigaciones actuales sabe que hubo obispo en Sigüenza fijándose la fecha en 8 de febrero del 1122, produciéndose la restauración archidiócesis, surgiendo un problema y es que Sigüenza no era tan rica como el concejo poderoso de Medinaceli, de modo que  el obispo tenía diócesis pero no tenía recursos económicos.

La duda era que si desde la restauración se estaba trabajando el Obispo no se había instalado definitivamente en Sigüenza hasta 1168 pues si había un territorio formado por las tierras de Ayllón, Almazán, y Medinaceli que tenía todo el control de Guadalajara, solo la parte del río Henares y la ribera baja, hubo algún tipo de necesidad de instalarse en la archidiócesis de Medinaceli, pero en las fuentes se insiste mucho en la presencia del Obispo llegando un momento en que como necesita una sede optando la usar la antigua aldea y convertirla en una ciudad con unas de las salinas más importantes de la época.
En 1174 se dio un nuevo privilegio confirmando en anterior indicando que se está poniendo en marcha una nueva política concediendo el permiso para instalar otras más habitables y crear una ciudad en tres años, con todo el poderío de un señor feudal con riqueza suficiente para administrar todas las rentas, siendo una de las zonas más importantes, consiguiendo crear una ciudad, que el dinamismo de la sociedad medieval fue capaz de crear una ciudad que es Sigüenza, que curiosamente está en una ladera que se supone que estaba condicionado a algún aspecto desconocido, pero que se desarrolla de la ladera para abajo y  no al otro lado del cerro que sería su emplazamiento natural.

Se sabe que es una ciudad que desde que se construyó se puede observar perfectamente las diferentes etapas, marcando los límites de su crecimiento, consagrándose la Catedral  y el episcopado de Don Cerebruno, que en 1167 promocionará al azorbispado de Toledo, se construyen las iglesias de Santiago y San Vicente.

En la prelatura del heredero de la mitra, Don Joscelino, se inaugura la nueva catedral, por supuesto inconclusa. En torno a ella asienta un grupo episcopal y hacia él se prolongarán las calles superiores, llegando a alcanzarla a mediados del siglo XVI.


PASEO POR LAS CALLES DE SIGÜENZA 


IGLESIA DE SAN VICENTE MÁRTIR






Los orígenes de la celebración que convierte al santo en patrón de la localidad se encuentran en un 22 de enero del año 1124, día en que un Obispo francés procedente de Aquitania, Bernardo de Agén, tomaba el castillo y la ciudad que estaban en poder de los musulmanes para consagrarla al santo del día. Años más tarde, se erigía una iglesia dedicada a San Vicente, una joya del arte románico que ya en sí misma merece la visita, y que está situada en el corazón de la ciudad medieval.


Desde el siglo XII es parroquia seguntina esta iglesia de San Vicente, cuya advocación está estrechamente relacionada con la historia de la reconquista de la ciudad. Fue el 22 de enero de 1124, día dedicado a este santo diácono y mártir, cuando las tropas castellanas, al mando del obispo seguntino Don Bernardo de Agén, conquistaron el castillo de Sigüenza a los musulmanes. En recuerdo de esta victoria, se dedicó a San Vicente una de las parroquias que se alzaron en la ciudad a mediados del siglo XII. A principios del XIII se amplió el primitivo templo y su interior es hoy un ejemplo del estilo protogótico. Viajero, desde la plazuela del Doncel, donde se alza la casa solariega gótica de la familia de Martín Vázquez de Arce, solo podrás ver sus muros y su torre de las campanas. Pero si avanzas lentamente por la Travesaña Alta podrás descubrir poco a poco las arquivoltas de tradición románica que componen su portada, semejantes a las alzadas por estos mismos años en la fachada principal de la catedral. Si quieres admirarlas en todo su esplendor, tienes que situarte frente a ellas al final de la calle San Vicente, la que en aquellos años unía la Judería seguntina, ubicada en la Travesaña Baja, con la Travesaña Alta, sede de las ferias anuales de la ciudad. Antes de continuar tu camino, penetra en su interior, rehabilitado magníficamente por su párroco, para admirar su Cristo gótico".


Su interior, de una sola nave cubierta con techumbre de madera, muestra detalles de un románico con algunos detalles que lo aproximan al protogótico. Presidiendo el altar destaca una espléndida talla policromada de un Cristo crucificado probablemente de los siglos XII-XIII.



IGLESIA DE SANTIAGO





S-XXI. En la iglesia de Santiago es titularidad del obispado y por convenio con el Ayuntamiento y la Diputación se va a proceder a instalar en ella el centro de Interpretación del románico de la Provincia de Guadalajara con una campaña arqueológica que se está llevando a cabo en la que se ratifica todo lo que se conocía en las excavaciones de la actual iglesia, se ha encontrado debajo una muralla, apareciendo una moneda de Alfonso VIII.



Estas excavaciones van despacio,  pero se va confirmando todo mediante nueva tecnología con el electroradar que es una especie de escáner que permite sin escavar mediante ondas ver si hay objetos y después con un sistema informático se ha observado que hay estructuras unidas al ábside que se están documentando, y en la segunda campaña de excavación se está encontrando y corroborando todo lo que ya se tenía documentado , has el óvulo de Alfonso VIII que sirve para datar la época de la consagración de la iglesia, y unas estructuras de las cuales los arqueólogos tienen muchas dudas y eso supondría que Sigüenza en algún momento no estaba limitada a una pequeña aldeíta.




En las excavaciones arqueológicas se Sigüenza no aparece nada, absolutamente nada anterior al s-III, lo que se decía que era islámico era mudéjar, no habiendo nada islámico.


Aproximadamente en el año 2016 en la primera casa  en una campaña para reformar aparecido en la primera casa aparecieron dos o tres fragmentos de cerámica, pero en las fuentes documentadas dice que no hay nada islámico en la ciudad, pero los arqueólogos tienen la dificultad que al ver formas cerámicas que son de  hace 400 o 500 años se tienen la duda si esa forma de cerámica islámica se usaba en esa época, aunque el origen sea del s-IX, sí el elemento no tiene contextualización una pieza aislada no dice nada, que es lo que ocurre en muchos edificios.

Los arqueólogos están tratando de ver si lo que ha aparecido en la Iglesia de Santiago es islámico o no, con lo cual estaría dentro de esa campaña para conocer el crecimiento de la ciudad en la época feudal y los alarifes, es como se hacía hace 200 años, al ser una especie de torre que puede ser defensiva, por lo que se han incorporado a los equipos de arqueólogos nuevos expertos para ver si lo descubren, en la campaña del 2018 habrá análisis para ver si se pueden descifrar algunas cosas.

Las iglesias de Santiago y San Vicente están muy cerca, de modo que Santiago ocuparía una parte del barrio hasta la caída de la ladera, en esa época el párroco conocía a todos sus feligreses y cuando la población de una ciudad crece es necesario crear una nueva parroquia ya que juegan un papel no solo administrativo y religioso sino también sociológico pues es necesario involucrarse en la problemática de un grupo grande. Las parroquias no pueden agrupar a un grupo muy elevado de personas haciendo necesario la creación de otras para repartir la población.

En ocasiones para dar servicio correctamente a 5.000 habitantes era necesario crear 4 u 5 parroquias, Guadalajara en su momento de mayor expansión en el s-XV tenía 10 parroquias para 8.000 habitantes.

Por lo tanto, no es extraño que las iglesias estuvieran tan cerca unas de otras, con el tiempo sufren transformaciones manteniendo el papel de parroquia y Santiago tendría más transformaciones, por ejemplo lo que hoy día se ve de Santiago es una ampliación pues en su principio era una iglesia muy humilde y al tener más recursos económicos se decidió en un momento dado ampliarla y antes de terminar la obra decidieron ampliarla en tamaño, etc.

Con el tiempo Santiago perdió la categoría de parroquia convirtiéndose en un convento, pero ya no era época medieval.





La iconografía está modificada de su colocación primitiva, pues al hacer la calle de enfrente al ponerla en un lado se veía en el centro del pórtico.




Las parroquias eran el nexo de unión de las familias a los 20 o 30 años del nacimiento de la ciudad y ya parecían funcionando las dos parroquias, curiosamente de la Catedral no se habla en las fuentes.






Al fondo queda una noción de la muralla primitiva y como la ciudad se fue ampliando quedó incorporada a las viviendas.

La ciudad se crea alrededor de una fortaleza rodeada de una Muralla, y fuera de la muralla, hacia poniente, creció de forma importante el arrabal, formándose las calles de San Lázaro y Bajada del portal Mayor, hacia los Tintes.

En los fueros de repoblación se estableció que el Concejo, Ayuntamiento determinaba que los repartidores, que según llegaba un vecino se le asignaba dentro del casco de la ciudad el sitio donde debía construir su casa, así como un lote de tierras, en la repoblación de esta primera época se aceptaba a cualquier persona que viniera porque había que repoblar rápido, aunque fueran delincuentes de los delitos más graves de la edad media, el asesino y el que venga con mujer robada.

Para convertirse en vecino y tomar posesión de las tierras y casa de pleno derecho para poder vender, arrendar o cambiar tenía que pasar un tiempo, y en estos fueros de primera época y de primera necesidad no había problema, el concejo asignaba donde construir la casa y el lote de tierras que pudiera cultivar para alimentar a la familia. Se asignaban para evitar conflictos entre los vecinos y al año de haber cultivado esas tierras ya pasaban a ser de dueños de pleno derecho y ya ese repoblador podía decidir qué hacer con sus posesiones.

Cualquier persona que llegase a la ciudad con caballo y armas según iban pasando las décadas el acceso a la propiedad y el acceso a los cargos vecinales se iban condicionando a un nivel determinado de riqueza.

En la carta puebla de Zorita como necesitan repoblar la zona en 1180 ya pertenecía a la Orden de Calatrava estableciendo que cualquiera que tenga caballo y armas pueda ser alcalde, juez, etc. en el Fuero Grande de Zorita que no está fechado en la época de Fernando III la frontera se había abandonado y ya solo podían ser alcaldes los que tengan caballo de guerra y un equipamiento militar potente y profesional, ya no valía cualquier caballo y cualquier garrucha, porque a la llamada del rey si se estaba en Zorita y llamaban de cualquier parte del Mancha ya no se podía ir con un jumento y un palo, hacía falta un buen equipamiento militar de modo que se iban limitando las posibilidades para acceder a cargos públicos.

PASEO POR SUS CALLES

Sigüenza serían como dos ciudades muy cercanas y poco definidas, tiene la parte de arriba que era la ciudad de los obispos y abajo donde está la Catedral, que era donde los canónigos ejercen su labor.
Era un señorío compartido con el obispado, funcionando como dos ciudades diferentes cada uno pagaba la parte de sus rentas.
En el 2080 es el aniversario de la consagración de la Catedral, que se construyó sobe una iglesia primitiva románica.

CASA DEL DONCEL



La Casa del Doncel o palacio de los Marqueses de Bédmar es un edificio de estilo gótico civil se empezó a construir en el siglo XIII se sus cimientos originales quedan algunos restos en el sótano, fue completamente levantada entre la segunda mitad del siglo XV y principios del XVI.


Construcción casa-torre de tres plantas con carácter de vivienda por el tipo de ventanas, con gárgolas y adornos del tercer cuerpo adornado por cascabeles que coronan a las almenas.


Edificio por la Universidad de Alcalá de Henares con salones decorados con cenefas mudéjares, separados por bellos arcos de yeserías de idéntico estilo.




Esta fachada la remodeló la Universidad de Alcalá de Henares, y la plaza de delante de la casa del Doncel no es original.



ARCO PASO A LA PLAZA MAYOR





ARCO DEL PORTAL MAYOR




PLAZA DEL AYUNTAMIENTO o PLAZA DEL MERCADO






En el siglo XV, el cardenal Mendoza decide derribar un lienzo de la muralla para crear un nuevo espacio diáfano, de aprox., 1320 m/2 frente a la Catedral, donde celebrar espectáculos y el mercado semanal con una estructura rectangular, rodeada por una galería porticada para guarecerse los días de lluvia, que llega hasta la Puerta del Toril.


Las casas del Cabildo están adornadas con escudos.




PLAZUELA DE LA CÁRCEL




Durante la Edad Media, la plazuela de la Cárcel, fue la Plaza Mayor medieval, donde estaban edificios civiles más importantes, la cárcel, el Concejo y una posada.

Aquí se celebraba el mercado al ser un emplazamiento muy conveniente, al estar cerca a la puerta del Hierro, por donde accedían las de mercancías y próxima al barrio judío, donde habitaban los comerciantes de la ciudad, constituyendo el centro geométrico de la Sigüenza medieval. Este edificio está reformado en el s-XV, la ubicación del mercado cambiaría en la época del Cardenal Mendoza que fue el que desarrolló todo el plan urbanístico de la zona y la Catedral de la época medieval y la renacentista y trasladando el mercado a la plaza.


LA CATEDRAL DE SIGÜENZA



La Catedral de Sigüenza está dedicada a Santa María la Mayor, patrona de la ciudad de Sigüenza. Tuvo su origen en enero de 1124, cuando el obispo Bernardo de Agén (1080–1152) reconquistó la ciudad a los musulmanes, en tiempos del reinado de Doña Urraca, hija de Alfonso VI. Fue nombrado obispo en 1121 (antes de la conquista del lugar), por el arzobispo de Toledo, Bernardo de Sedirac, de la orden de Cluny, continuando la influencia de esta orden monástica introducida en el Reino de Castilla por Alfonso VI y Alfonso I de Aragón, esposo de la reina castellana. Este obispo consiguió de Alfonso VII (1126-1157) privilegios y donaciones con los que acrecentar la nueva población, unificando los dos poblados: el superior en torno al castillo y el inferior, el mozárabe, en torno al cauce del Henares.

Las obras de la catedral pasaron durante los siglos posteriores por diferentes obispos, que fueron edificando en estilos propios de cada época hasta la nave central realizada en pleno gótico en el siglo XV, en el que se cubrieron las bóvedas del crucero siendo obispo el futuro cardenal Mendoza. La parte ornamental se alargó hasta el siglo XVIII.

Sobre todo en el interior destaca su aspecto gótico, ya que en unas reformas del siglo XVI se destruyeron las absidiolas laterales románicas para construir la girola. Las dos torres exteriores de la fachada principal con merlones dan un aspecto de fortaleza militar a la catedral, como en otros edificios religiosos de la misma época, por las funciones de templo-fortaleza que habían de asumir. La de Sigüenza fue nombrada como la fortis seguntina.​



Las obras de la catedral pasaron durante los siglos posteriores por diferentes obispos, que fueron edificando en estilos propios de cada época hasta la nave central realizada en pleno gótico en el siglo XV, en el que se cubrieron las bóvedas del crucero siendo obispo el futuro cardenal Mendoza. La parte ornamental se alargó hasta el siglo XVIII.



Parece la entrada un castillo, el hastial, dividido por dos recios contrafuertes que apuntalan sólidamente los muros y prestan al conjunto la belicosa, formando tres cuerpos que corresponden a las tres naves del templo catedralicio, se abren en cada una de éstos su respectiva puerta.

En la fachada el románico es del siglo XII  combinada con el gótico y con el barroco,  coronando la puerta principal hay un medallón en bajorrelieve barroco de la aparición de la Santísima Virgen a San Ildefonso entregándole la casulla sin costuras, en el cuerpo central hay un rosetón que ilumina la nave mayor, formado por 12 radios simbolizando los doce  apóstoles.

Las dos ventanas románicas de arcos de medio punto sobre las puertas laterales, en el siglo XIV para reforzar los muros adosaron a la fachada arcos ojivales por encima de los ventanales de los cuerpos laterales y del rosetón de la nave central.
A los lados de la fachada principal se alzan dos torres cuadradas en sillería de piedra arenisca y con cuatro cuerpos rodeados de finas molduras que sobresalen, en el cuerpo superior esta remata por almenas y gruesas bolas, donde se encuentran las campanas con grandes troneras de arcos de medio punto, en los cuerpos inferiores hay pocos vanos y alguna ventana asaeteada.

El  lado izquierdo fue construido en tiempos del obispo Bernardo y, en el s-XVI, el obispo Fadrique de Portugal agregó el cuerpo de las campanas, Las torres almenadas que flanquean la portada principal más que campanarios parecen reductos defensivos.

















PLANTA CATEDRAL SIGÜENZA






Las tres naves son de estilo románico del siglo XII, la central, más abocinada y alta, carece de ornamentación en sus archivoltas. Se llama de los Perdones, porque, según la tradición, el día de San Ildefonso se logran indulgencias entrando por ella. Las laterales ofrecen magnífica decoración, con motivos fitomórficos, de tipo geométrico y cierta evocación y ritmo mudéjar, con labores muy finas y gran belleza. Fueron mandadas ejecutar por el obispo D. Cerebruno.



del siglo XVI se destruyeron las absidiolas laterales románicas para construir la girola. Las dos torres exteriores de la fachada principal con merlones dan un aspecto de fortaleza militar a la catedral, como en otros edificios religiosos de la misma época, por las funciones de templo-fortaleza que habían de asumir. La de Sigüenza fue nombrada como la fortis seguntina.​













Tuvimos en placer de escuchar en el magnifico órgano tocata y fuga en re menor, BWV 565 -  pieza escrita para órgano por el compositor barroco alemán Johann Sebastian Bach.



CAPILLA FAMILIAR DEL DONCEL



En la capilla familiar se encuentran en las paredes los sepulcros de los abuelos del doncel, de los cuatro hermanos están enterrado su hermano y él junto con sus padres.
En las jambas del arco artesonado se abren dos grandes hornacinas, que contienen las urnas de Martín Vázquez de Sosa y Sancha Vázquez (abuelos del Doncel). La efigie del caballero D. Martín viste un hábito sobre la cota de malla y sostiene entre las manos el largo montante. La de su esposa, Sancha Vázquez, yace como dormida.

MAUSOLEO DEL ABUELO DEL DONCEL – MARTÍN VÁZQUEZ DE SOSA



La lauda sepulcral del abuelo curiosamente se encuentra de lado por necesidades de reforzar el muro tras unas obras s-XV.


MAUSOLEO DE LA ABUELA DEL DONCEL – SANCHA VÁZQUEZ





SEPULCRO DEL DONCEL DE SIGÜENZA





La palabra doncel significa joven perteneciente a la nobleza que aún no había sido armado caballero, sin embargo en este caso el joven caballero muerto en las guerras de Granada, se le dio ese nombre aunque no era un doncel cuando murió.

Su nombre era Martín Vázquez de Arce, nace en el año 1460, de familia pertenecientes a la nobleza estaban al servicio de la familia Mendoza, empleado como paje del duque, recibiendo una educación renacentista esmerada, entrenamiento en el manejo de las armas, murió a los 26 años, en una escaramuza contra los árabes.

Su propio padre quien recogió su cadáver y lo hizo enterrar en la capilla familiar que poseían en la catedral.  Hemos dicho que no fue un “doncel” y debemos explicarlo.
Un Doncel era la versión masculina de una “doncella”, y por definición, ni un doncel ni una doncella han “conocido” hombre o mujer, sin embargo estuvo casado y tuvo una hija legítima al menos, siendo nombrado caballero de la Orden de Santiago, como prueba la cruz roja que luce en sus vestiduras, algo que un doncel no podría haber conseguido.
El sepulcro del Doncel está ubicada en la capilla de San Juan y Santa Catalina, se trata de una de las principales esculturas del gótico tardío español.

Fue encargada por su hermano, Fernando Vázquez de Arce, y, aunque se desconoce con exactitud el escultor, se le atribuye a Sebastián de Almonacid, que la realizaría en el taller que tenía en Guadalajara. La fecha de realización de este conjunto funerario es entre 1486, año de la defunción del Doncel, y 1504, en que sale citado en el testamento de su padre como ya realizado en la capilla de la catedral.





 El sepulcro está colocado sobre tres leones  una hornacina en arco de medio punto, con la estatua del Doncel en alabastro. Lo que más resalta es que no es una figura yacente, dormida, sino que se encuentra recostado, con una pierna sobre la otra y apoya el brazo medio incorporado, en actitud de leer un libro que sostiene abierto en sus manos, se dice que era la Biblia, pero en la posición en la que se encuentra leyendo relajada ente no está en una posición e oración y recogimiento.

La iconografía habitual durante la Edad Media reserva los libros a personajes eclesiásticos, por lo que su uso en este caso puede considerarse una innovación, relacionada con el aumento de la literatura profana desde la crisis bajomedieval y la invención de la imprenta (presente en España desde 1472, con el Sinodal de Aguilafuente), aunque la difusión de la lectura que trajeron los libros de caballerías es posterior.
Por la posición de lectura parece que lee el libro mientras descansa de un ejercicio militar, con las piernas protegidas por su armadura, graciosamente cruzadas. La figura está vestida con armadura y con la cruz de Santiago en el pecho, pintada en rojo destacando sobre el blanco del alabastro. Se aprecia el puño de una espada y un pequeño puñal en la cintura. La cabeza está cubierta con un bonete que se le adapta totalmente. Aparecen a sus pies, cerrando la composición, un niño o paje apenado y un animal. En el frente del sepulcro dos pajes sujetan el escudo de armas y se encuentra ornamentado con delicadas tallas en candilieri. Toda la obra está policromada.

Sobre el monumento funerario está la inscripción en castellano antiguo que reza:
“Aquí yaze Martín Vasques de Arce – cauallero de la Orden de Sanctiago – que mataron los moros socorriendo – el muy ilustre señor duque del Infantadgo su señor – a cierta gente de Jahén a la Acequia – Gorda en la vega de Granada – cobró en la hora su cuerpo Fernando de Arce su padre – y sepultólo en esta su capilla – ano MCCCCLXXXVI. Este ano se tomaron la ciudad de Loxa. – Las villas de Illora, Moclin y Monte frío – por cercos en que padre e hijo se hallaron.”

En ese contexto simbólico se inscriben todos los detalles de la pieza escultórica. En el frontal de la peana, dos pajes muestran el escudo que contiene los blasones del linaje de los Vázquez de Arce. El personaje se inscribe y señala como miembro de una familia hidalga, de probada virtud, de añeja prosapia. Y es él precisamente quien con su acto heroico, con su muerte temprana inyecta nuevo valor a ese linaje. Apoya el brazo derecho la figura sobre un abultado haz de laurel, que es símbolo transparente de la Victoria, y que por su carácter de hierba inmarchitable presupone la eternidad del recuerdo, y la duración  y acrecentamiento de esa fama que ha conseguido el personaje con su acción. A los pies un pajecillo se muestra  apenado, doliente, apoyando su brazo derecho sobre el yelmo metálico del guerrero. Símbolo de Tristeza por algo irrecuperable, como será el batallar galano, la pelea varonil y astuta, la valentía serena del que cree firmemente en la razón que le mueve. El devenir de la humana peripecia, el terrenal oficio queda definitivamente anclado. El yelmo, que fue destello plateado en la guerra, es ahora, y será por siempre, un testimonio de irrecuperabilidad y muerte. Pero junto a él, un animal rebulle y levanta la cabeza, mirando al alto. Es un león, que puesto  a los pies del muerto dice de su Resurrección, de su segura llegada a la otra vida. Durante la Edad Media, es muy utilizado el símbolo de colocar un perro a los pies de un difunto, en estatuas y pinturas, queriendo significar con ello la Fidelidad como virtud primera y teologal del cristiano. En este caso del Doncel de Sigüenza, el león, que nace ciego y a los tres días recupera la vista, y “renace” es símbolo que aclara el sentido todo del sepulcro. Martín Vázquez resucitará, volverá a la vida, en contrapunto perfecto de ese yelmo llorado que le acompaña en expresión de  muerte. La alegría en la esperanza se confirma con los tres leones que soportan, en el pie del sepulcro, todo el peso del monumento.

SEPULCRO DE LOS PADRES DEL DONCEL




En el centro del panteón frente al altar se levanta un soberbio mausoleo doble de estilo pleno renacentista, que guarda las cenizas de Fernando de Arce y Catalina de Sosa, padres del Doncel, con las efigies yacentes.

Se sostiene sobre leones el padre del Doncel Fernando Arce yace sobre un cojín de laurel indicando su condición de militar y su madre Catalina Vázquez se Sosa sobre un cojín de seda.

Los perros  símbolo de las virtudes de fortaleza y valentía en combate, las virtudes de todo buen caballero o guerrero, de ahí que a los pies de la tumba de caballeros veamos los  perros, sim embargo a los pies de la madre el perro  simbolizaba las virtudes de lealtad y fidelidad al marido; las virtudes medievales de toda buena dama.




MAUSOLEO DEL HERMANO DEL DONCEL




En el sepulcro plateresco que contiene grutescos de gran belleza, donde se encuentran los restos del hermano del Doncel,  Fernando de Arce, fue Prior de Osma, Obispo de la diócesis de Canarias, se encuentra tumbado y revestido con los ornamentos propios de su condición, con la cabeza apoyada mitrada sobre cojines haciendo referencia a que era una persona poderosa,

Junto al arco que inscribe el sepulcro se encuentran las virtudes y en centro del arco la escena de la Ascensión, en lo alto se encuentran los apóstoles y la Virgen María. Más arriba se ve un trozo de túnica y los pies de Jesús entrando en el cielo, los rayos representan a la bajada del Espíritu Santo.

tiene una inscripción que dice: FERNANDVS DE ARZE PRIOR OXOMENSIS ECCLESIE; / DEMVM EPISCOPVS CANARIENSIS: REGIE MAIESTATIS / CONSILIARIVS. OBIIT AÑO MD XX II

Bajo los bancos hay aproximadamente 20 lápidas de personas nobles que tenían ese privilegio.


RETABLO SANTA LIBRADA



Conjunto plateresco que consta de cuatro partes.
El Obispo de Sigüenza era el representante de los Reyes Católicos siendo nombrado por ellos ante la Santa Sede nunca vino a España y gobernó la diócesis desde Italia y como el claustro románico se estaba hundiendo desde allí mando planos para construir un claustro nuevo con diseño gótico la portada es del 1507 es plateresca, es una de las primeras renacentistas de la Catedral.

La puerta de madera de la izquierda  la llaman preciosa del s-XIII, donde está representado Don Fabrique de Portugal uno de los grandes dejó una obra importante siendo obispo de la ciudad pensando en morir en Sigüenza y compro un terreno donde hoy está el Ayuntamiento y los soportales para hacer su palacio, y mandó traer las reliquias de Santa Librada que están situadas en el a aLtar central.

Esas reliquias se trasladaron en el s-XVI siendo veneradas en la cabecera románica procedentes de Aquitania que allí está la ciudad que lleva el nombre dela santa Librada hermanada a Sigüenza, pero el obispo se confundió y en lugar de mandar representar a la Santa que se venera en Sigüenza con el nombre de Librada se hizo una versión de Lusitania donde nueve hermanas fueron martirizadas veneradas en varias poblaciones tanto en Portugal como en Galicia ya que fue encontrada en Bayona a Santa Librada con sus ocho hermanas que están representadas alrededor del retablo, el obispo importó el fervor por la santa desde su tierra.

Dejando todos sus bienes a la ciudad para que lo enterrasen en ella al morir, por esa razón aún,  muriendo fuera en la catedral está el mausoleo de don Fabrique rodeado de dos acólitos que le sujetan una especie de palio pequeño con forma de paraguas, el obispo esta con mitra y guantes orando y pidiendo por su alma a la Santa que tanta devoción le tenía.
Ese error lleva de la antigua Aquitania a Lusitania, de una Santa Librada que no se conocían sus hermanas nacidas en un solo parto en Francia.
Santa Librada defendió en cristianismo hasta el martirio muriendo decapitada, pero en el s-XVII un arqueólogo confundió a Santa Librada con  Santa Wilgefortis es una popular santa, cuyo culto surgió alrededor del siglo XV

El retablo es una de las mejores obras del arte plateresco (siglo XVI). Se encuentra adherido sobre el muro norte del brazo norte del crucero en la línea del sepulcro del cardenal Mendoza de Toledo. Su traza fue concebida por Alonso de Covarrubias, en la que bajo la dirección de Francisco de Baeza intervinieron Sebastián de Almonacid, Juan de Talavera, y Petijuán, a la manera de retablo-altar-sepultura, que fue restaurado en el pontificado de D. Fernando de Andrade y Sotomayor (1640-1645) añadiéndose las cartelas. Se compone de varios cuerpos sobre zócalo con temas ornamentales. En el centro del primer cuerpo se abre una gran hornacina con arco de medio punto que cobija el altar de la santa. Contiene un precioso retablo manierista-rafaelesco, con escenas de la vida de Santa Librada, conocida por el cristo del faldón y la representan crucificada igual que Cristo. La noción de la Santa crucificada en la Catedral ha sido colocada en el s-XXI, pues estaba guardada porque en el segundo Concilio muy cuestionado por los errores no se colocó pero el Obispo de Sigüenza hasta los años 60 que comienza el Concilio Segundo al ser la patrona de la diócesis desde el s-XII  y en el siguiente Concilio se aclara que no era francesa ni tenía hermanas.

Después de perder el culto como patrona se perdieron sus ermitas y se ha creado una Cofradía para rehacer lo destruido durante errores y años.

Lo poco que queda de Santa Librada está en la arqueta del retablo, después de 16 meses de restauración, siempre se le atribuyó el diseño a Covarrubias, pero al rehacer toda la historia para tramitar los permisos y autorizaciones se comprobó que Covarrubias no aparece en ningún documento, en el caso de trabajar hubiera sido aprendiz y no maestro.
La sacristía si es de Covarrubias ya que fue quien hizo las trazas, junto a las cabezas y la bóveda.

Se hizo un pasillo alrededor del altar para rodearlo y no tener que dar una gran paseo para ir desde el altar a la sacristía.


PUERTA DE LAS MUJERES





Puerta del barroco churrigueresco s-XVI de nogal labrada con las imágenes de figuras femeninas siete en un lado y siete en el otro son las hermanas de Santa Librada, el número siete corresponde al número divino y simbólico, el 12 es 4 x 3 y si en lugar de multiplicar se suma da el 7, etc.
Son siete Santas y en cada esquina hay un jarrón que representa el símbolo de pureza de María, llevan instrumentos musicales, monstruos encadenados, etc., todas las Santas son reconocibles por los símbolos que usan, se supone por el número que son las hermanas de Santa Librada.

SACRISTÍA DE LAS CABEZAS




A la entrada se encuentra una vitrina donde está la Biblia políglota traducido en Alcalá de Henares en griego y en latín está en Nuevo Testamento y en Hebreo el Antiguo Testamento, los cinco libros de Pentateuco en cuatro idiomas y en arameo, escrito en tela de lino.


Obra de las más importantes del Renacimiento español. Su diseño se debe a Alonso de Covarrubias, y su ejecución a diversos maestros: Francisco de Baeza, que se documenta su intervención como aparejador; Nicolás de Durango (1535); el maestro seguntino Martín de Vandoma (1554), etc.

El interior se forma por una estancia, dividida en cuatro tramos, de planta rectangular. Su bóveda es encañonada y sorprende por la extraordinaria decoración del techo. 




Tardaron treinta años desde el proyecto a la finalización de la obra.




Siempre hay una cabeza rodada de cuatro flores, como no hay bocetos de los rostros no se pueden comparar, y probablemente las caras sean personas reales pertenecientes a familiares o amigos de los artistas, así personajes célebres, reyes, nobles, etc.



Las esquinas y los vértices son grupos de cuatro angelitos, formadas por angelitos con alas.

Hay 304 sillares y en cada una cabeza, una flor y rodeada de ocho cabecitas pequeñas y uno grande igual a nueve por casetón cabezas que multiplicadas dan 2736






La llaman la sacristía de las 3000 cabezas, los rostros no están documentados en el cabildo, pero están representadas personas concretas, según historiadores, cronistas, hace tiempo dijeron que se haría un estudio rostro por rostro,  pero no se ha hecho, y si se sabe por otras iconografías que hay rostros identificados, incluso está el propio Covarrubias, son rostros muestra de la sociedad del momento, se parecían monjes, curas, nobles, sirvientes, hombres, mujeres, Papas, etc. Hay un rostro que se asemeja a Carlos V.

Las cabezas grandes representan los que están cerca de Dios, y el friso pequeño son caras de los que no están en gracia de Dios, sí los que están arriba llegaron al cielo los que están abajo son los que no llegan.

En la puerta se observa Adán y Eva y trompetas que anuncian al Salvador.







LAS CAJONERAS 




Las cajonerías son de nogal con tallas platerescas, obra del maestro seguntino Martín de Vandoma, estando en uso después de 450 años.




CLAUSTRO, CORREDORES Y CAPILLAS DE LA CATEDRAL




De estilo gótico tardío, es obra de finales del siglo XV, se construyó a principios del XVI. De planta cuadrada, se adosa al costado norte de la Catedral. Se forma por cuatro pandas en cada una de las cuales se abren siete altos ventanales ojivales, cerrados por altas columnillas y calados con celosías de trazo gótico. Cada panda del claustro mide 40 m de largo. Posteriormente se colocaron entre los ventanales unos contrafuertes que sujetan unos arcos escarzanos que vienen a sustentar la cornisa del claustro en el que bajo la dirección de Alonso de Vozmediano (1498-1519).

El abovedado del claustro es a base de crucería y nervaduras con las dovelas claves labradas, muy hermoso.


En las claves de las bóvedas y en las repisas donde descansan los arcos torales, formeros y transversales, y en sus muros laterales se abren numerosas capillas.


En el centro del jardín, del mismo, aparece un elegante y bellísimo brocal renacentista del magnífico aljibe de piedra sillería, que sirvió antiguamente para surtir de agua potable a los capitulares, beneficiados y muchos vecinos de la ciudad. Unas preciosas puertas de arcos semicirculares y decoración plateresca, cerradas por rejas del mismo estilo, dan acceso al jardín central de dicho claustro.



Entre los elementos más destacados de las vistas de este MIRADOR, se pueden señalar la Sirena y el Ciprés. Ambas imágenes forman parte de los tópicos de la literatura y la emblemática del momento y aluden al relato del jardín del más allá, visualización del Viaje poético al Paraíso que sitúa a la capilla funeraria como lugar de las Hespérides, representando la supervivencia del alma al separarse del cuerpo. 
Llama la atención las rejas con corazones invertidos.


MUSEO DE TAPICES DE LA CATEDRAL





En la sala se encuentra una serie de ocho tapices, a la espera de que lleguen próximamente otros ochos tapices que se están restaurando en Madrid, los dieciséis tapicen  llegaron el 30 de noviembre de 1664 y se colgaron por primera vez en la capilla mayor de la catedral de Sigüenza los 16 tapices flamencos, regalo de su obispo Andrés Bravo de Salamanca

Todos los tapices llevan las iniciales BB que es la fábrica de tapices que los han fabricado la serie que estamos contemplando corresponde a la serie: Alegorías de Palas Atenea.
Fuero diseñados por un pintor flamenco al estilo del francés Charles Poerson, fueron realizados, a partes iguales, en los talleres de Bruselas de Jean le Clerc y Daniel II Eggermans. Ocho de ellos estaban dedicados a la “Historia de Rómulo y Remo” y los otros ocho a “Las Alegorías de Palas Atenea”.


1-La recompensa de las armas (El botín de guerra). Firmado por Daniel II Eggermans


El botín de guerra está en el suelo a los pies de Palas Atenea.


2-Marte huye, Júpiter se alegra por el final de la guerra obtenido por Palas y Paz. Firmado por Jean le Clerc



Marte es el vencido representado arriba huyendo, el dios de la guerra es derrotado.

3-El triunfo y la gloria de Palas y Paz. Firmado por Daniel II Eggermans








Todas las armas amontonadas ya no son necesarias, y en la mano el ramito de olivo como símbolo de la paz.



4-La gloria de las Musas estimulada por Palas y Paz. Firmado por Jean le Clerc


Pegaso está en el Monte Párnaso.

5-Palas y Paz conducen a los trabajadores al templo del honor. Firmado por Daniel II Eggermans




A Hércules le llevan de la mano hacia el Olimpo

6-Los vagos y pusilánimes son puestos en fuga por Paz Firmado por Daniel II Eggermans







Los buenos trabajadores contribuyen a la paz y los vagos salen con prisa por eso llevan representado un conejo en la cabeza como símbolo de velocidad.

7-Palas triunfante, acompañada de las musas, por el triunfo de las armas. Firmado por Jean le Clerc






Palas Atenea montada  en el carro del triunfo.

MUSEO DIOCESANO





D. Miguel Ángel Ortega es el director del museo y Canónigo de la Catedral de Sigüenza y que tuvimos el honor que fuera nuestro guía.



Tras su pequeña y bella fachada esconde un amplio espacio donde expone una importante muestra de arte religioso de los siglos XII al XX, además de importantes colecciones de arqueología y textiles, junto a algunos manuscritos.

El museo es una recopilación de obras que estaban por diferentes iglesias, conventos, etc. de la provincia patrimonio de la diócesis.

El museo diocesano está ubicado en lo que era un Palacio del s-XVI que perteneció a la familia de los Gamboa cuyo escudo está en la fachada del museo, pero que anterior a los Gamboa  fue la casa de un canónigo de la Catedral – capellán mayor y Vicario general de la diócesis de Sigüenza y Provisor del Cardenal Gonzalo Jiménez de Cisneros,  también llamado Francisco.

Cuando llegó a Sigüenza siendo Cardenal Cisneros mano derecha del cardenal Mendoza decidió dejar la vida civil e irse a un Convento y hacerse franciscano y por eso cambio el nombre de Gonzalo por Francisco.

En el año 2017 en el museo diocesano hubo una exposición titulada Cisneros de Gonzalo a Francisco, porque era la historia de Cisneros de vivido y actuado en Sigüenza antes de ser franciscano y antes de ser Cardenal.


Patio interior del Palacio de s-XVI



El palacio se compone de un patio central que no estaba techado, y alrededor del patio había una serie de dependencias que eran las salas de la casa de los Gamboa.
El arte no solo para decir que bonito o que feo, sino que además hay que ver que aporta de histórico.


Mural S.XVI de la iglesia de El Atance 



La pintura mural y otras fueron las últimas que llegaron al museo que estaban en una iglesia de El  Atance que fue desmontada, pues el lugar donde estaba ese pueblo quedó sumergido por un pantano y el fresco se desmontó y llevó a Guadalajara, pero al desmontarla de los retablos barrocos que tenía apareció detrás del retablo una hornacina con la pintura.

En la pintura se ve la noción de purgatorio que además de llamas, está representado San Miguel luchando con el dragón y en lo alto está cristo entronado y unos santos y mártires.
Del purgatorio habló el Concilio de Trento del Dogma de la Existencia Real del lugar llamado Purgatorio y lo describe precisamente como está representado en la pintura, por lo cual eso es un dato que lo pintaron después del Concilio de Trento, es decir se trata de una pintura aproximadamente del año 1546/1550, de hecho, la pintura está datada en el s-XVI.
Cuando se arrancaron esas pinturas de la pared, debajo encontraron otras con el mismo tema, de manera que está representado lo mismo Cristo en lo alto y en el centro San Miguel y dos santos y la diferencia otros dos murales adosados el Cristo no enseña las llagas y no está acompañado de santos y mártires, sino solo de dos personas la Virgen María y Juan y San Miguel tiene una diferencia es que está prsando con una balanza a los que entran por la izquierda saliendo por la derecha que son los considerados dignos del cielo, y los Santos son San Roque y San Antón porque tiene un cerdito.

Comparando las dos pinturas desde arriba Cristo misterio de la Ascensión está en el trono mostrando las llagas como juez de vivos y de muertos, antes el en las pinturas antiguas estaba la Virgen y San Juan que era el misterio de la Déesis bizantina, pre medieval que significa intercesión, y en la pintura segunda ya no está la Virgen, sino santos y mártires se reconoce a Santa Bárbara por tener la torre, y entre ellos están los apóstoles S. Pedro, S. Pablo, dos Papas a la derecha el que tiene una tiara como mitra con tres coronas que es  San Gregorio Magno y San León Mago al otro lado, también está S. Pedro mártir, etc.
Ha cambiado la concepción eclesiológica debiéndose al Concilio de Trento y a partir de ahí se dice que la Iglesia está formada por tres grandes estados, la Iglesia Triunfante que es Dios, la Iglesia Purgante y al Iglesia Peregrina.

Las pinturas dan dos datos como es el Purgatorio y la cristología que habla del Concilio de Trento, por lo tanto, una pintura es anterior al Concilio y la otra es posterior al Concilio.
San Miguel ha dejado de pesar las almas que es una reminiscencia más medieval y lo que hacía con la cruz de herir al dragón son cambios importantes.

Han dejado de tener cierta devoción a San Antón, porque tanto San Roque como San Sebastián son los patronos, desde las primeras pinturas y a las segundas hubo un problema que fue la epidemia de peste y reforzaron esa idea.

Una de las epidemias más virulentas en todo el valle del Henares 1592,  con lo cual aquellas pinturas que son anteriores a la primera mitad del s-XVI y la otra pintura podría ser posterior primera mitad del s-XVII, por lo tanto entre el s-XV primera mitad del s-XVI sería la primera pintura y después del Concilio de Trento hubo que adecuar el tema de purgatorio, el tema de la eclesiología y además unos de los cánones  de ese concilio después de definir el purgatorio, la doctrina para explicar y enseñar a los fieles era la pintura.
Toda esa información la puede dar una pintura.

En el museo diocesano hay un retablo pequeño en relación con los habituales, porque el mecenas era una familia corriente y que de lo mucho o lo poco que tuvieran lo invirtieron en esa obra.

En el retablo se lee que lo mandaron hacer los honrados Antón Raposo y su  mujer (espacio en blanco) M en 1555 y en la fecha como no cabía entera pusieron los últimos número romanos dentro del último V.

En el cuadro todas las figuras tienen el mismo tamaño menos una que en pequeñito aparece pintado el mecenas que está rezando antes el santo que tiene tamaño proporcionado con el resto de la obra. Además,  aparece el perro de San Roque.
Su mujer no está representada y además no está su nombre en el retablo solo la letra M y el resto arañado.

En el retablo están los mismo tres santos que en el mural anterior S. Antón, S. Roque, S. Sebastián armado con arco y flechas.

S. Antón está en la pintura probablemente porque el mecenas se llamaba Antón y además le está rezando en un época donde la peste estaba haciendo estragos y su mujer es de suponer que estaba enferma y solo le quedaba la opción de donar el “retablito” a la iglesia de su pueblo Villaseca de Henares para dejar constancia del momento.
Antón intentó por todos los medios salvar a su mujer, pero lo más seguro es que muriera por la peste.
Todas las pinturas hablan.
  

Normalmente los retablos presentan unas enseñanzas gráficas para que todo el mundo pudiese entender sino sabían leer.


Magnífico retablo de madera policromada y pintura sobre tabla, de estilo gótico, hispano-flamenco, del último cuarto del siglo XV. La excelencia de calidades táctiles y la expresión concentrada y melancólica de algunas figuras, nos inducen a considerar esta obra como una derivación del Maestro de San Ildefonso, a través de la escuela toledana.
En el retablo aparece San Roque y San Juan, pues normalmente se celebraba juntos su fiesta, además hay otros santos el Apóstol Felipe, Santa Ana, la Virgen y Jesús, San Bartolomé y San Agustín Obispo porque en la mano tiene un libro y una iglesia como ciudad de Dios.

Otro “retablito” con las mismas intenciones que el de Antón
En la predela se encuentra vestido de cardenal con un león a sus pies, San Jerónimo, San Fabiano, La Virgen, Cristo y San Juan, San Sebastián, San Federico y San Alfredo, y un santo vestido con traje luterano que era san Agustín, pero eso en castilla no era posible, y en el mismo retablo aparece San Agustín vestido de obispo, pero es que Lutero era agustino, de modo que San Agustín está vestido de agustino, y eso no tenía nada que ver, los agustinos cogieron el nombre de San Agustín.

Todos los santos están den grande san Bartolomé, San Cristobal, la Anunciación de la Virgen y el Calvario, pero nuevamente y en pequeñito aparece la figura del mecenas, antes en el otro retablo le faltaba su mujer, sin embargo, este señor el problema lo tiene su criatura, se si pone atención en el niño está clara la época por la vestimenta, pero el mecenas va vestido de con una ropa del que le sobresale una especie de encajes, una estola, larga, de lo que va vestido es de rabino judío del año 1492 de la época de la expulsión de los judíos y ese señor tenía dos opciones o se iba o se quedaba y en Villaseca de Henares había una judería que dependía de la judería de Sigüenza.

Por lo que cuenta la pintura ese señor decidió quedarse con su familia, pero no se confiaba en la conversión de los judíos, y la mejor manera era darse publicidad y lo mejor en su pueblo fue donar a la iglesia un retablo, en el que él y su familia se pusieran a los pies de la Virgen María, pero el rabino tiene una kipá negra parecida a un solideo y que usaban en el s-XV – s-XVI y los agustinos como cualquier sacerdote llevaba un bonete o un solideo negro, y los agustinos iban vestidos de negro con el solideo negro, de modo que el judío piensa que se parece su kipá a un solideo y decide que el pintor, pinte a san Agustín no vestido de obispo sino vestido de agustino para que vea que no son tan distintos, y además de estar a los pies de la Virgen coloca entre sus santos favoritos a san Bartolomé o Natanael,

En el Evangelio dice que cuando san Andrés le quiso presentar a Natanael a Jesús y Natanael le dijo: “pero de Jerusalén puede salir algo bueno” y cuando se encaró Jesús con él le dijo: “ahí tenéis un judío de verdad”, mensaje iconográfico del rabino a los de su pueblo.

Siempre las pinturas cuentan cosas interesantes.



FRAGMENTOS DE RETABLOS Y TABLAS




Parte del Retablo Mayor de Villaseca de Henares





Dedicado a su patrón que es San Blas que contiene dos tablas con la vida del santo. Tiene una careta de cerdo, está predicando a animales fieros y salvajes entre ellos un unicornio, pero todo eso depende de las leyendas de los santos.
Esas leyendas de la vida de los santos salían de un libro llamado Leyenda Dorada de Santiago de  la Vorágine

Leyenda Dorada de Santiago de  la Vorágine


Para leer el pdf  tocar la caratula del libro1.



Todas las hablas hablan de la leyenda y la vida de santa Marta, la gente de la época veía la iconografía y aprendían sobre la vida, si el cura de Rienda tenía que predicar solo tenía que explicar las escenas.

Todas esas escenas van siguiendo la leyenda de santa Marta en la Leyenda Dorada, por lo tanto, es un libro importante en arte.

Durante la visita al museo disfrutamos de una obra de Luis de Morales que según expertos del museo del Prado es la mejor copia de un original de Tiziano pero el del museo diocesano no es del taller de Tiziano.



Así como, dos tablas de san Francisco procedentes del convento que existió en Mondejar.
Misterio de Salvador Carmona



MISTERIO DE SALVADOR CARMONA



Misterio procedente de Barbatona Luis Salvador Carmona.



PROFETA ELÍAS


Escultura del Profeta Elías,  atribuida a Salzillo, obra llena de sensibilidad en el rostro y la perfección de las formas.

También pudimos admirar una tabla de San Francisco en las zarza con un pasaje de la vida san Francisco cuando se arrojaba a unas las zarzas, procedente de una de las capillas del Monasterio derruido en la Salceda que estaba dedicada a San Francisco

La obra representa el momento en que San Francisco se retiró a la Poricúncula para evitar las tentaciones demoníacas, se lanzó a una zarza que floreció de manera milagrosa, teniendo la visión de un ángel que le exhortaba en nombre de Cristo a solicitar una indulgencia al papa para todos lo que fueran a rezar a ese lugar, en el día de la liberación de San Pedro. Este es el asunto que trata Ribera en este lienzo, temática muy frecuente en la iconografía católica tras el Concilio de Trento. El santo aparece tumbado en primer plano, sufriendo los pinchazos de algunas zarzas. Su escorzada postura, en clara diagonal, le permite contemplar al ángel que aparece en la parte superior de la composición, creando una estructura a base de diagonales con la que se organiza el ritmo en la escena.



Desde la planta superior pudimos ver el patio y la colección de las casullas antiguas.



SALA DEDICADA A LA VIRGEN









VIRGEN DE LA ANTIGUA ROMÁNICO

 Huida en la borriquilla





LA INMACULADA NIÑA





La llaman la inmaculada niña de Zurbarán representa a la Virgen muy joven suspendida en el aire, rodeada de cabezas de ángeles, con la luna a sus pies junto a la ciudad de Sevilla perteneciente al cabildo por encargo al pintor.

El Cabildo de Sevilla le confió la seguridad del cuadro a Jovellanos que tenía un palacete y fue donde acabaría el cuadro.

Es una alabanza a la Virgen María y se fueron pintando las letanías y aparecen símbolos en la pinturas, como una escalera, una puerta que abre al cielo, estrella de la mañana, el jardín sellado por la virginidad, ciprés frondoso, obra de sabiduría, fuente sellada, torre de marfil, etc., todas esas letanías están pintadas alrededor de la Virgen.


TALLAS DE FLAMENCAS



La iconografía cristiana desde las catacumbas es el alma del pintor cristiano que va hacía el puerto seguro, y por eso Zurbarán aprovecho los puertos para que la Virgen intercediera.
Los colores son azul y blanco sucio, que serán constantes en la futura obra de Zurbarán.


EL SANTO ENTIERRO




Son dos obras colocadas juntas para entender que representan los mismo en entierro de Jesús, con la diferencia que la obra de Tiziano tenía mucha luz y la románica es hierática y oscura.

En la de Tiziano Jesús está más fuerte y en la obra flamenca delgado y además hay menos profundidad, pero en la de Tiziano la profundidad es mayor.
Es decir, entre una obra y otra pareció Miguel Ángel, apreciándose en arte antes y después de Miguel Ángel, los pintores querían pintar a la manera de ese artista y a ese arte se le llamó MANIERISMO, de la palabra latina maniera.

Tiziano era un manierista y el otro autor flamenco anónimo llamado el maestro de Pozancos no había conocido a Miguel Ángel.

Los personajes que aparecen en la obra son José de Arimatea y Nicodemo que fue a ver a Jesús de noche, la Virgen María, San Juan, María Magdalena y María, están representadas las tres Marías.

En la obra gótico flamenco aparecen los mismos personajes.

Llama la atención que dos artistas que no se han conocido nunca, sin embargo, por esas reglas que nadie sabe eligen al mismo personaje Nicodemo para hacer una caracterización de un personaje que estaba de moda en ese momento, teniendo mucho que ver con Miguel Ángel, en la flamenca está representado el mecenas, sin embargo en la otra  obra está pintado el artista, Tiziano, porque antes de Miguel Ángel, el mecenas era el que tenía la fama, pero después de ese primer renacimiento que había en el quatroccento con Leonardo da Vinci, etc. los artistas van adquiriendo protagonismo, a Tiziano se lo encarga Felipe II, pero no le pinta se pinta él, pero en el flamenco si está el mecenas.
Por lo que es evidente que había unos cartones grabados que iban usando unos y otros para la iconografía.

 Martín Fernández señor feudal de Pozancos, capellán de la Catedral de Sigüenza que sucedió en el cargo a Cisneros y que recibió y pasó a ser canónigo de primera ración nombrado por Cisneros en 1480.

INMACULADA CONCEPCIÓN - ZURBARÁN




La Concepción Inmaculada de Zurbarán que estamos viendo es del s-XVI tiene diferencias con el de Zurbarán, ya no es tan niña y está concebida y en Concilio de Trento decidió en su última sesión decidió hacer algo con la iconografía cristiana entre ellos destruir el juicio final de Miguel Ángel, pero al final solo lo retocaron.

Y esta Inmaculada también conducía a error, por eso esta iconografía es anterior al Concilio de Trento y la que vimos antes era posterior, esta Inmaculada está en cinta y posterior a esta Zurbarán hizo una más niña.

Del color azul y rojo pasaría al azul y blanco divinidad y pureza, los elementos de las letanías siguen estando presentes, espejo, sol, estrella, luna, fuente, torre, pozo, etc., pero la luna en el que pinto después está invertida, eso tiene que ver con la Leyenda Dorada, pero hay otra obra que la escribió un pintor llamado Francisco Pacheco que se llama Tratado de la Pintura.

Obra: Tratado de la Pinutra
Autor: Francisco Pacheco

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El Concilio de Trento decía que no se tenían que meter en cómo había que pintar los Santos, pero sí antes las cosas que eran demasiado atrevidas había que se buscara a un clérigo experto en arte o a un pintor con fama para que hicieran un tratado de cómo se debían hacer y cómo interpretar la pintura, nombrando a Pacheco y  en ese Tratado habla de cómo tiene que ser la iconografía de la Inmaculada.

Y si se compara con el libro se observa que la Virgen primera que pintó Zurbarán le convence bastante a Pacheco, pero lo que no le gusta es que esté embarazada, que use color rojo para la maternidad y que la luna esté hacía arriba es más antojo de las indicaciones de Pacheco, pues dice que era más conveniente que la luna este al revés por considerar que la Virgen María a Jesús, es cómo la luna al sol, cuando la cara de la luna refleja la luz del sol la cara de la luna que se ve es la oculta y por eso Zurbarán cambia la posición.


PORTADA Y PILA BAUTISMAL DEL S-XII 



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