miércoles, 27 de diciembre de 2017

INTRODUCCIÓN A LA ARQUEOLOGÍA 5 - LOS VISIGODOS - guadahumi2

INTRODUCCIÓN A LA ARQUEOLOGÍA  5   
LOS VISIGODOS      -       guadahumi2


05 introducción a la Arqueología 5    - guadahumi

18 de Diciembre 2017



ARQUEOLOGÍA DE LA ÉPOCA VISIGODA



Desde la isla de Gotland, en Suecia habría una migración en masa hacia el sur debido a factores climáticos. Algunos se dirigieron hacia el este, y fundaron un reino en la península de Crimea. Ya divididos en Visigodos y Ostrogodos (parece que la traducción más lógica sea “Godos de occidente” y “Godos de oriente”, pero no hay acuerdo en ese extremo), los primeros se ocuparon de apiolar en masa a los romanos en la batalla de Adrianópolis (Tracia, 378 d.C.), en lo que supondría la derrota más intensa de las legiones desde Cannae: El emperador Valente y alrededor de 40.000 de sus hombres perecieron en el campo de batalla.

Había una existencia de Proto-Estados en el Norte Asturias, la Marca Ampurias en Gerona, y unos Semi-Estados que dieron origen al Reino de Navarra en el s-XV.

Los diferentes territorios cristianos ( Reino Astur-Leonés, Condado de Castilla, Reino de Navarra, Condado de Aragón y Condados Catalanes), que se consolidaron como entidades políticas frente a los musulmanes que habían conquistado y destruido el Reino Visigodo de Toledo.

En el s-VI El siglo VI d. C. comenzó el 1 de enero del año 501 y terminó el 31 de diciembre del 600. Unos años después del fin de la época clásica  con el derrumbe del Imperio romano occidental en el año 476 y el inicio de la época medieval. Es llamado el «Siglo de Bizancio».

NACIONALISMO Y AQUEOLOGÍA

Desde los inicios de la Arqueología como ciencia a mediados del siglo XIX, ha servido a los estados para justificar las identidades nacionales y culturales. Este uso continuó a lo largo del siglo XX, diversificándose para nutrir de argumentos el colonialismo, los regímenes totalitarios o el capitalismo. La justificación estatal-nacionalista ha sido continuada en las sociedades actuales por los modelos desarrollistas, cuyos argumentos se basan en los beneficios económicos, sean desde una perspectiva exclusivamente neoliberal o con el barniz del llamado " desarrollo sostenible " , una nueva perspectiva " neocolonizadora " de la materialidad arqueológica que la justifica como motor y parte del mercado.

“LOS FALSOS ARQUEÓLOGOS Y EL NACISMO
Fuente: ABC – Cultura - José-Pablo Jofré 13/03/2013 



Germania fue el concepto diseñado por la megalomaniaca estrategia de marketing nazi: un territorio, un pueblo, una raza superiores debían legitimar el discurso de Hitler. Material de respaldo y documentación (pseudo) científica que cristalizara estas ideas fue fundamental. El Museo Focke de Arte e Historia Cultural de Bremen, al noroeste de Alemania, se ha atrevido a sacar a la luz el conjunto de aquel material que buscaba probar científicamente la existencia de Germania y crear una mitología a su alrededor.

«La exposición supone una contribución al estudio del capítulo más oscuro de nuestra historia y subraya la elevada importancia de la libertad en la ciencia y la investigación», ha dicho el ministro de Cultura alemán, Bernd Neumann sobre esta exposición titulada «Graben für Germanien»: «Excavaciones para Germania», que hace referencia a los falsos hallazgos arqueológicos para legitimar el mito, demostrar la supremacía de la Alemania nazi y legitimar las pretensiones anexionistas del régimen. Así, en tiempos del nacionalsocialismo, los arqueólogos trabajaron al servicio de la política obligados a presentar pruebas científicas de una civilización germánica muy desarrollada, así como del extenso territorio que habitaba.

Desde 1939, arqueólogos y pseudocientíficos se desplazaron por los territorios conquistados por las tropas de Hitler para buscar objetos atribuibles a la civilización germánica. Usaron incluso a trabajadores forzados y a presos de los campos de concentración en esta labor. En Europa del este los arqueólogos al servicio del régimen saquearon museos y expulsaron de sus cargos a los expertos locales, mientras en las zonas norte y occidental trataron de ganar colaboradores remitiéndose a un supuesto pasado común.

Pero Germania fue un término inventado por los romanos para referirse a los pueblos que habitaban el lado derecho del Rin. «A pesar de no existir ningún pueblo que se autodenominara germánico o que se refiriera a su patria como Germania, este concepto ha estado ligado a ideas y asociaciones diversas», ha precisado la comisaria del proyecto expositivo, Karin Walter.

La creación en los laboratorios nazis del mito de Germania –que sigue presente en la extrema derecha internacional– argumentó simbólicamente la creencia en una raza superior aria y terminó legitimando los crímenes cometidos por el Tercer Reich. Diseñado el concepto, inventado su respaldo histórico con objetos arqueológicos, el paso siguiente fue su difusión: la muestra presenta murales escolares, distintivos y cromos con los que se transmitía a los niños la noción de Germania, omnipresente en clase o en el tiempo libre.

También se exhiben películas, fotografías, programas de radio, libros, carteles y revistas de la época que nos recordaban que Germania era una civilización altamente desarrollada; muy superior a la griega y romana.”


ASENTAMIENTO VISIGODO PENÍNSULA IBÉRICA

El asentamiento visigodo en la península Ibérica se realizó, como zona preferente, en el ámbito de la meseta, área caracterizada por el predominio de la agricultura cerealista, pero también por su escasa población y su débil desarrollo urbano. No obstante, los visigodos, comparados con el grueso de la población hispanorromana, no dejaban de ser una minoría. Ello no impidió, sin embargo, que se afirmara su poder militar y político. Se había producido un desplazamiento del reino visigodo desde la ciudad francesa de Tolosa hasta Toledo, que pasó a ser su núcleo central en el territorio ibérico. Importantes pasos en orden a la consolidación del reino visigodo de Hispania los dio el monarca Leovigildo, el cual, en el año 585, puso fin al reino suevo de Gallaecia, tras derrotar a su rey Mirón. También combatió Leovigildo a los indómitos vascones, erigiendo frente a ellos la plaza fuerte de Vitoriaco. Leovigildo, en cambio, tuvo serios problemas con su hijo Hermenegildo, el cual abrazó el catolicismo, lo que suponía dejar el arrianismo, corriente heterodoxa a la que se había adscrito, años atrás, el pueblo visigodo. No obstante, unos años más tarde, el 589, su hijo y sucesor en el trono, Recaredo, lograba la unificación religiosa, al abandonar, en el III Concilio de Toledo, la herejía arriana y aceptar los postulados de los Concilios de Nicea y Calcedonia, o lo que es lo mismo: el catolicismo. El paso decisivo hacia la unidad política del conjunto peninsular se alcanzó en las primeras décadas del siglo VII, cuando el monarca Suintila puso fin a la presencia bizantina en el litoral levantino. Los monarcas visigodos, que en un principio habían adoptado el título de Reges Gottorum, pasaron a llamarse Reges Hispaniae, pues su soberanía se extendía sobre todo el territorio de la antigua Hispania romana, aunque en algunas comarcas, como las de los vascones, sus habitantes siguieran luchando por su independencia. El último gran paso en orden a la unificación del espacio peninsular se dio a mediados del siglo VII con el monarca Recesvinto, al promulgar, en el año 654, el Líber Ludicum, texto más conocido como el Fuero Juzgo, el cual se basaba, lógicamente, en los Principios del Derecho romano. Dicho texto suponía la unificación jurídica, a todos los efectos, entre la población hispanorromana, que era mayoritaria, y los visigodos.

En el año 711 Batalla de Guadalete. Se enfrentaron en el rio Guadalete los ejércitos del reino Visigodo de Hispania, capitaneados por su  rey don Rodrigo y un ejército de árabes y bereberes al mando de Táriq Ibn Ziyad. La batalla terminó con aplastante victoria musulmana y fue el inicio de la pérdida de Hispania y del sometimiento rápido de casi todo su territorio  al imperio musulmán. 
EL s-VIII llamado el «Siglo de los Sarracenos».Este siglo destaca por la expansión musulmana, los árabes conquistan definitivamente el norte de África e invaden la península ibérica, los árabes derrotan a los visigodos en la batalla de Guadalete donde el propio rey Rodrigo fallece en la batalla, debido a las disputas internas y a la falta de resistencia efectiva, el Reino visigodo de Toledo desaparece asimilado por el Califato omeya, estos cruzan los Pirineos e invaden territorio franco, siendo detenidos por Carlos Martel en la decisiva batalla de Poitiers, frenando de manera definitiva a los musulmanes. Décadas después, el rey de los francos, Carlomagno, funda el Imperio carolingio, y es reconocido emperador por el propio papa, el imperio apenas sobrevivirá al propio Carlomagno, ya que tras la muerte de su débil hijo, sus nietos se repartirán su imperio.

Mientras, en oriente, los musulmanes expanden sus fronteras hasta el río Indo, en la frontera con la India, llegando a su máxima expansión en oriente, en el Indo, y en occidente, en la provincia de la Septimania. Por su parte, el Imperio bizantino, sufre el asedio de Constantinopla en los años 717 y 718 a manos de los árabes, asedio que logra ser roto gracias a la ayuda de los búlgaros y a las casi inexpugnables defensas de la ciudad.

Al-Ándalus

Tras la conquista musulmana de la península ibérica, al-Ándalus se integró inicialmente en la provincia norteafricana del Califato Omeya. En el año 756 se convirtió en el Emirato de Córdoba y posteriormente en el año 929 en el Califato de Córdoba independiente del Califato Abasí. Con la disolución del Califato de Córdoba en 1031, el territorio se dividió en los primeros reinos de taifas, periodo al que sucedió la etapa de los almorávides, los segundos reinos de taifas, la etapa de los almohades y los terceros reinos de taifas. Con el avance de la Reconquista iniciada por los cristianos de las montañas del norte peninsular, el nombre de al-Ándalus se fue adecuando al menguante territorio bajo dominación musulmana, cuyas fronteras fueron progresivamente empujadas hacia el sur, hasta la toma de Granada por los Reyes Católicos en 1492, que puso fin al poder islámico en la península ibérica, aunque la mayor parte de la población musulmana quedó en la península, unos convirtiéndose al catolicismo y otros, con creencias más arraigadas, marcharon a las cumbres de Sierra Nevada, Alpujarra.

La arqueología medieval es una disciplina de reciente creación, con raíces en el siglo XIX, pero reconocida de forma autónoma a partir de mediados del siglo XX. En España, todavía no ha alcanzado el nivel de desarrollo que tiene en países como Inglaterra o Francia.

Su objetivo es estudiar el mundo medieval y las distintas sociedades que se producen en éste a través de las fuentes escritas pero también utilizando la arqueología con objetivos históricos claros. El análisis de los hallazgos arqueológicos, que incluyen materiales como la cerámica, edificios, urbanismo, etc., junto a los datos historiográficos permiten una visión más completa de la realidad del medievo, una interpretación que es el objetivo de la arqueología medieval. El arqueólogo medievalista, es por encima de un técnico, un historiador medievalista.

La Arqueología medieval investiga distintas áreas: el ámbito cronológico-histórico y las distintas Etapas históricas en que se divide la Edad Media (Románico, Gótico…), los diferentes ámbitos geopolíticos (visigodos, Al-Andalus,…), la interpretación de las grandes temáticas comunes al ser humano: la guerra, la muerte, las creencias…, sus construcciones (edificios civiles, religiosos, militares, espacio rural, espacio privado y público, etc.), así como la producción de artes aplicadas, especialmente la cerámica, las vidrieras y la metalistería.

Si la Edad Media comienza con la caída del Imperio Romano, comprender este periodo que abarca de los siglos V al XV desde la perspectiva historiográfica y arqueológica supone el estudio de las fortificación y sistemas defensivos y su evolución en Europa, la distribución de sus espacios habitados, los asentamientos humanos rurales y urbanos y el fenómeno de la despoblación, así como las necrópolis y arquitectura religiosa y la industrial.

Ha de tenerse en cuenta en la investigación de la Arqueología Medieval, el estudio de los Reinos Germánicos, sus migraciones y asentamientos, su estructura socioeconómica y su producción material. El proceso de feudalización europeo provocó una nueva distribución de la población, diferenciándose el ámbito rural del urbano, así como su arquitectura: palacios, castros y fortificaciones, necrópolis, monasterios, iglesias, baptisterios y ermitas, el tipo de producción industrial y comercialización de ésta, así como unas nuevas manifestaciones artísticas y de artes decorativas, que se fueron particularizando según las distintas regiones europeas.

En el ámbito europeo debemos también diferenciar la arqueología oriental y bizantina, con su periodización y particularidades, sus precedentes romanos y sus influencias orientales, su arquitectura y producción industrial y artística, así como su expansión e influencia en Occidente.


Todo lo anterior evidencia que la arqueología medieval, presenta características específicas concretas en cada país. En España y Portugal, por ejemplo, se da la convivencia de diferentes sociedades, la feudal cristiana y la islámica, con sus correspondientes interrelaciones y la evolución de las sociedades desde el mundo tardoantiguo al altomedieval, y la llegada al final de la Edad Media, cuando se instituye el estado central castellano pero que seguirá sufriendo las particularidades socioculturales de la presencia de población morisca.



ETAPAS ARQUEOLOGÍA MEDIEVAL EN ESPAÑA

En España la arqueología medieval se suele dividir en las siguientes etapas:
  • ÉPOCA VISIGODA (finales s-VI – inicio s-VIII)





  •   AL-ÁNDALUS





  • ÉPOCA FEUDAL/CRISTIANA (finales s-VIII – 1492)




Arqueología de Época Visigoda, entre los siglos V-VII d.C., y que incluye la etapa arriana y la etapa católica.

Arqueología de Al-Andalus, entre los siglos VIII al XV, diferenciando el periodo paleo-andalusí (siglo VIII), la etapa emiral (siglo IX), la etapa califal (siglo X), la etapa taifa (siglo XI), almorávides y almohades (siglo XII), el Reino de Granada (siglos XIII al XV).

Arqueología de los reinos hispano-cristianos, desde el siglo VIII al XIII. Diferenciando los núcleos de resistencia que se producen desde los primeros momentos de la invasión árabe en el siglo VIII y IX. Y posterior momento de la repoblación (siglos X-XIII).

Arqueología de la Baja Edad Media, entre los siglos XIV y XV.


Incluyéndose en todas estas épocas el estudio de las minorías sociales y religiosas mozárabe, mudéjar y judía.

DOCUMENTOS s-XVII y XVIII

El Reino nazarí de Granada, también conocido como Emirato de Granada o Sultanato de Granada, ​ fue un Estado musulmán situado en el sur de la península ibérica, con capital en la ciudad de Granada, que existió durante la Edad Media.

El reino fue fundado en 1238 por el noble nazarí Mohamed-Ben-Nazar, aunque originalmente tenía su centro de poder situado en Jaén. Unos años después el monarca nazarí trasladó su corte a Granada, alrededor de la cual organizó su nuevo estado. El reino sobrevivió en esta precaria situación gracias a su favorable ubicación geográfica, tanto para la defensa del territorio como para el mantenimiento del comercio con los reinos cristianos peninsulares, con los musulmanes del Magreb y con los genoveses a través del Mediterráneo, lo que hizo que tuviera una economía diversificada.
Sin embargo, fue perdiendo territorios paulatinamente frente a la Corona de Castilla, hasta su definitiva desaparición tras la Guerra de Granada, mantenida entre 1482 y 1492. El reino nazarí de Granada sería el último Estado musulmán de la península ibérica, la antigua al-Ándalus. Su último rey fue Muhámmad XII (conocido como Boabdil el Chico), derrocado por los Reyes Católicos, que se vio obligado a rendir Granada el 2 de enero de 1492. Tras esto fue definitivamente incorporado a la Corona de Castilla como Reino de Granada.

Moriscos

Nombre dado a los musulmanes que permanecieron en España una vez finalizada la conquista cristiana de todos los territorios peninsulares.

La conquista del reino musulmán de Granada en el año 1492 supuso la incorporación de miles de familias de esta religión a la cultura cristiana, las cuales se sumaron a la ya voluminosa población de origen musulmán que vivía en los reinos cristianos desde lejanos tiempos de la Edad Media.
A principios del siglo XVI los moriscos estaban repartidos por cuatro grandes áreas: reino de Valencia, valle del Ebro, tierras de Murcia y reino de Granada. Se mostraron muy tenaces en su resistencia a abandonar su religión y cultura. Supusieron además un peligro potencial al ser vistos como un apoyo firme y favorable a las ofensivas del imperio musulmán en el mediterráneo español. Formaban, por otro lado, comunidades muy cerradas, con un elevado número de población y con una importancia económica notable. Todo ello hizo que las relaciones entre la mayoría cristiana y la minoría musulmana fueran siempre difíciles, hecho puesto en evidencia durante la rebelión de los moriscos en las Alpujarras (1568-1570), que tuvo como consecuencia la dispersión forzosa por tierras de Castilla de los musulmanes granadinos. Las medidas políticas que llevaron a cabo los reyes durante el siglo XVI para superar esta situación, siendo muy variadas, no dieron sin embargo los resultados deseados. En el año 1609, el rey Felipe III acabó por ordenar la expulsión de todos los moriscos de España, alrededor de trescientos mil, lo que supuso una fractura extraordinaria en todos los niveles y la evidencia de un fracaso.

Mozárabes

Nombre dado a los cristianos que vivían en los territorios dominados por los musulmanes tras la conquista de la Península Ibérica en el año 711.

Desde el primer momento los musulmanes mostraron un gran respeto hacia los cristianos, que eran, como ellos mismos y como los judíos, “gentes del Libro”, es decir, habían recibido la revelación divina. Como protegidos del Islam, se les garantizó la conservación de sus bienes y de sus derechos privados, así como la libertad para practicar su religión. A cambio de esta tolerancia, los cristianos tuvieron que aceptar el pago de ciertos impuestos y de la aceptación de una posición social inferior. Estaban obligados a pagar un tributo de carácter personal (yizya), que afectaba a los varones entre 20 y 50 años, y un impuesto territorial (yaray). La comunidad mozárabe conservó su organización política, eclesiástica y jurídica. Tenía sus propios condes, que eran los responsables de la comunidad ante la administración musulmana, sus jueces, que actuaban según las normas del derecho visigodo, sus recaudadores de impuestos y sus obispos. El Estado musulmán se reservó el derecho a intervenir en el nombramiento de las autoridades civiles y eclesiásticas cristianas además de convocar sus concilios. Durante el siglo VIII los musulmanes necesitaron la colaboración de los cristianos en las tareas de gobierno, por lo que no dudaron en utilizarlos como administradores y funcionarios, pero a medida que el dominio musulmán se hizo mayor los mozárabes fueron perdiendo influencia. En el siglo IX disminuyó la tolerancia de los dirigentes omeyas, debido a la participación de los mozárabes en los movimientos separatistas de las Marcas fronterizas y en las revueltas sociales. Esto hizo que el número de conversos a la religión árabe aumentara y que los que siguieron fieles al cristianismo se arabizaran para evitar su discriminación. Contra esa dependencia se levantaron, entre los años 851 y 859, los mozárabes más intransigentes, dirigidos por Eulogio de Córdoba. Buscaban de forma voluntaria el martirio, lo que se conseguía injuriando al Islam en público, algo castigado con la pena de muerte. Este movimiento dañó la convivencia entre cristianos y musulmanes, haciendo que muchos mozárabes emigrasen a los reinos hispanocristianos de norte y otros se hicieran musulmanes, con lo que a finales del siglo X la comunidad mozárabe era algo marginal en Al-Andalus. Más adelante, en los periodos de dominación de los almorávides y de los almohades, la situación de los cristianos incluso continuó deteriorándose.

Mudéjares

Nombre dado a los musulmanes que permanecieron en los territorios ocupados por los cristianos durante el periodo de la reconquista.

El avance hacia el Sur de los reinos cristianos provocó que numerosas poblaciones de credo musulmán se vieran englobadas en un sistema político cristiano: son los mudéjares. Los acuerdos pactados con las poblaciones de Al-Andalus vencidas variaron según la forma en que fueron ocupadas, pero en general se garantizó la permanencia de los musulmanes y se les permitió conservar su religión, costumbres, organización y derecho, aunque las obligaciones tributarias que mantenían con la antigua administración fueron transferidas al nuevo poder. Esta actitud de los monarcas cristianos se producía, principalmente, por la necesidad de no despoblar y mantener la vida económica de los territorios ocupados. Sin embargo, a medida que la dominación se hacía efectiva, iban aumentando en número y su condición se fue deteriorando. La presencia de mudéjares fue grande en los reinos de la Corona de Aragón, particularmente en Valencia. En su mayoría eran campesinos que dependían jurisdiccionalmente de los nobles. En la Corona de Castilla la comunidad mudéjar estuvo formada por pequeños campesinos y, sobre todo, artesanos, que vivían agrupados en barrios propios, llamados aljamas. Sin embargo, el incumplimiento de los compromisos contraídos en las capitulaciones provocó la salida de numerosos musulmanes hacia Granada, expulsados por el rey Alfonso X  después de la sublevación del año 1264. Durante el siglo XV las disposiciones legales se hicieron más restrictivas, pero a diferencia de los judíos, los mudéjares no despertaron el recelo de las masas populares cristianas. A pesar de todo, su situación se complicó después de la conquista del reino nazarí de Granada en el año 1492. Aprovechando la sublevación que protagonizaron los musulmanes granadinos en el año 1498, los Reyes Católicos obligaron a todos los mudéjares a convertirse al cristianismo. Los que tomaron esa opción pudieron quedarse en sus hogares y se les pasó a conocer como moriscos. Aunque finalmente en el año 1609 los moriscos fueron expulsados de España por el rey Felipe III. Emigraron principalmente al norte de África, en donde acabaron integrándose.

La frecuente dedicación de los mudéjares a trabajos artesanales y el gusto por la sofisticación de numerosos reyes y nobles explican que podamos hablar de un “arte mudéjar” o “mudejarismo” en la mayoría de los movimientos artísticos hispanos desde el siglo XI al XVIII. Se trata de la implantación directa de elementos, maneras y estéticas del Islam andalusí (sobre todo taifas o nazaríes) en construcciones cristianas, algo que confiere enorme personalidad a estas obras.

Muladíes

Nombre dado a los cristianos que se convirtieron al Islam después de la conquista musulmana del año 711.

Los muladíes constituyeron el grupo mayoritario de la población musulmana de Al-Andalus porque, aunque éstos no persiguieron a los cristianos ni trataron de atraerlos a su fe, la mayor parte de la población adoptó la religión islámica. Ésta conversión masiva se explica por las ventajas económicas y sociales que comportaban el ser musulmán. Para los nobles hispanovisigodos significaba la posibilidad de mantener sus propiedades y su posición de preeminencia; para el resto de la población significaba librarse del pago de los impuestos personal y territorial, que afectaba a los no musulmanes. La arabización de los muladíes fue tan profunda que externamente no era fácil distinguirlos de los árabes de nacimiento. Sin embargo, en la práctica las diferencias entre viejos y nuevos musulmanes se fueron acentuando como consecuencia de la política nacionalista practicada por los dirigentes omeyas. Esta discriminación propició la aparición de sublevaciones y revueltas en las que se mezclaban factores sociales y políticos. Los principales focos de disidencia se localizaron en las Marcas fronterizas, aunque a finales del siglo IX se extendieron por la mayor parte de los territorios de Al-Andalus. En las ciudades de Zaragoza, Toledo y Mérida el descontento de los muladíes se transformó en movimientos independistas dirigidos por las autoridades locales. Las revueltas sociales desembocaron en una sublevación general de los muladíes contra la aristocracia árabe en el año 878. Desde la fortaleza de Bobastro, situada en la serranía de Ronda, Omar Ben Hafsun, se alzó como defensor de los muladíes y aglutinó a todos los rebeldes del sur de Andalucía. El movimiento comenzó a declinar tras la conversión al cristianismo del dirigente muladí en el año 899, pero hasta la época de Abd Al-Rhaman III no se consiguió su represión total.

ARQUEOLOGÍA VISGODA


RECÓPOLIS – ZORITA DE LOS CANES - GUADALAJARA




Este Yacimiento es una ciudad  visigoda que  fue mandada construir por el rey Leovigildo en el año 578, para conmemorar la consolidación del poder real y el estado conocido como reino visigodo de Toledo. Se le dio el nombre de Recópolis en honor del futuro rey llamado Recaredo.


MAPA DE LAS INVASIONES BÁRBARAS






Los Bárbaros invadieron Roma.



Los visigodos surgieron de grupos góticos anteriores (posiblemente de los tervingios)​ que habían invadido el Imperio romano a partir de 376 y habían derrotado a los romanos en la batalla de Adrianópolis en el año 378. Los visigodos invadieron Italia bajo el mando de Alarico I y saquearon Roma en el año 410.

Saquearon la ciudad eterna, Roma. Desde entonces este pueblo dividido por los romanos: en Visigodos y Ostrogodos, se convirtió en sinónimo de bárbaro, en paradigma de la violencia.


YACIMIENTO TESORO DE GUARRAZAR – TOLEDO


COLUMNA YACIMIENTO GUARRAZAR


TESORO DE GUARRAZAR







Oro, piedras preciosas, perlas, nácar, vidrios artificiales y cristal de roca - Guarrazar (Guadamur, Toledo) - Siglo VII (621-672)




Guarrazar puede entenderse como la ocultación planificada de un conjunto de objetos con un especial valor simbólico y económico, formado por piezas completas y probablemente en uso.
La mayor parte de los materiales recuperados pertenecen a objetos votivos, con donaciones reales y de personajes de alto rango, la documentación conservada indica que también incorporaba material litúrgico, por lo que su caracterización como el ajuar procedente de una iglesia o lugar sagrado parece la más adecuada.



CONVERSIÓN DE RECAREDO



A principios del año 587 Recaredo, que ya debía de tener simpatías católicas, se hizo bautizar en secreto. Desde entonces intentó convencer a los obispos arrianos para que aceptaran la doctrina trinitaria, celebrando tres reuniones: una con los obispos arrianos, a los que animó a reunirse con obispos católicos para discutir los problemas teológicos y determinar cuál era la verdadera fe; una reunión conjunta de obispos católicos y arrianos, con fuertes polémicas entre ambos bandos, y con un Recaredo presionando a favor de los católicos; y finalmente, no habiendo logrado convencer a los arrianos, una reunión con los obispos católicos a los que comunicó que ya había realizado su opción por el catolicismo. Al comunicarle a los obispos católicos su fe estaban presentes muchos nobles visigodos, y al parecer lo siguieron, y hacia la primavera y el verano del 587 las iglesias arrianas fueron expropiadas y entregadas a los católicos.



En la España medieval encontramos características propias. En la construcción, se utiliza tapial incluso en palacios para las edificaciones islámicas, y se aprecia un gran uso en las grandes construcciones cristianas de grandes sillares a soga y tizón, heredados del mundo romano, y sillarejo en construcciones más humildes. Destaca, asimismo, el uso de arcos y bóvedas, el románico utiliza el arco de medio punto y pilares y pies derechos y el gótico arco apuntado, bóveda de medio cañón, y columnas complicadas.

La influencia europea de Cluny, en el primer románico, difunde elementos como pilares cruciformes, que ayudan a equilibrar tensiones constructivas, y una profusa decoración, que será mitigada tras la reforma del Císter y que a su vez, incorporará novedades como la bóveda de crucería y el arco apuntado. Los muros se estrechan, permitiendo más iluminación interior, y mayor esbeltez y altura en la construcción.

Todas las iglesias medievales tienen orientación E-O, con ábside siempre al Este, y suelen tener una o varias naves, en número impar. La planta puede tener forma de cruzar interna o externamente. En el gótico, la estructura se hace más complicada técnicamente, añadiéndose en las grandes catedrales, girola y dos naves laterales para capillas.

Otra construcción importante del momento son los monasterios, que aúna la explotación agropecuaria y la oración, para lo que necesita de un templo y espacios al aire libre. El claustro separa la zona pública de la privada y suele estar ajardinado y dividido en cuatro partes, situándose un pozo o fuente en el centro.

Los núcleos urbanos surgen a partir de distintos comienzos: encomienda, señorío, repoblación de ciudades abandonadas y las nuevas ciudades suelen hacerlo a partir de un castillo, ubicado en la zona más alta del lugar. El castillo suele ser de planta cuadrada, con torres circulares y una torre central "del Homenaje". Cercano a él solía estar la iglesia, con una plaza al frente. Las calles se distribuyen a escuadra o de forma circular en torno al centro de la ciudad, que suele estar rodeada por una muralla, con torres de planta redonda. Los cementerios solían estar extramuros y las tumbas suelen llevar decoraciones simbólicas.


EXPANSIÓN IMPERIO BIZANTINO


YACIMIENTO ARQUEOLÓGICO - GUARRAZAR - TOLEDO


YACIMIENTO ARQUEOLÓGICO NUMANCIA -  SORIA






MAPA YACIMIENTO CARPIO DE TAJO


En 1926 en CARPIO DE TAJO se descubrió la necrópolis de El Carpio de Tajo está ubicada en la zona de influencia de Toletum, siendo la zona sur de la Sierra de Gredos y norte de los Montes de Toledo lugar de alto poblamiento en la antigüedad tardía.

Constituida por un total de 285 tumbas de las cuales 90 contenían en su interior elementos de adorno personal y en determinados casos un depósito funerario (por ejemplo monedas romanas muy rodadas). Los objetos hallados suman un total de cerca de 300 y tienen la mayoría de ellos connotaciones claramente visigodas.



BROCHES CARPIO DE TAJO



IDEOLOGIA Y ARQUEOLOGIA
  •  GRUPO GÓTICO



Hasta el Reinado de Eurico, emigración y presencia visigoda con materiales neo visigodos se distribuyeron por la aportación de elementos procedentes del Levante europeo..

  • GRUPO VISIGODO


Desde el reinado de Eurico hasta e reinado de Suintila.

Asentamiento: presencia de estos materiales exclusivamente en el centro peninsular,     periodo en el que se produjo la evolución de los elementos anteriores.
  •   GRUPO BIZANTINO

A partir de la transformación como consecuencia de la unidad política derivada de la conversión al cristianismo, en el III Concilio de Toledo.
Disminución y desaparición de los materiales anteriores a finales del s-VI y principios del s-VII.




MAPA VISIGODO HISPANIA



NECRÓPOLIS  CASTILTIERRA - SEGOVIA


FÍBULAS AJUAR CASTILTIERRA – SEGOVIA 





AJUAR CASTILTIERRA – Segovia




FÍBULAS AJUAR ALOVERA – GUADALAJARA



FÍBULAS
Se usaba para fijar prendas de vestir y adornos femenino, tenían una función religiosa con la imagen de ídolo para fijar amuletos, también podía indicar su rango social, la actividad que desarrollaba,  procedencia étnica.

Se han encontrado en necrópolis por lo que se usaban en ritos funerarios, como parte del ajuar del difunto, aportando información del fallecido enterrado con las fíbulas. Según su diseño definían una identidad.


ARTE TRES CULTURAS



Tres Culturas diferentes en el reino visigodo de Toledo (siglos V-VIII), el mundo andalusí (siglos VIII-XV) de época califal, taifa o nazarí, y los reinos cristianos (siglos VIII-XV) en que se desarrollan los estilos artísticos prerrománico, románico y gótico en las ciudades y monasterios, o el Camino de Santiago.


NECRÓPOLIS DEL  DURATÓN  - SEGOVIA


DISTRIBUCIÓN DE LA NECRÓPOLIS


EXCAVACIONES DURATÓN











LA NECRÓPOLIS DE ÉPOCA VISIGODA DE 
ESPIRDO-VELADIEZ

Bibliografía





DAGANZO DE ARRIBA – Madrid

Excavaciones Visigodas


Hay una sepultura formada por grandes losas. La superior había sido puesta al descubierto por las lluvias y fue hundida por el peso del carro. Excavada dicha sepultura, se hallaron dos pendientes de oro formados por un hilo retorcido, con perlas olivaceas con adornos, dos placas circulares con vidrios incrustados, una bulla circular aplanada, de bronce, con restos de la cadena, y un broche de cinturón de placa.



AZUQUECA DE HENARES – Guadalajara 



FÍBULAS AJUAR CASTILTIERRA – SEGOVIA 






VESTIMENTA
 RECREACIONES CINEMATOGRÁFICAS.






LAS ETNIAS 




ETNIA
El término etnia proviene de un vocablo griego que significa pueblo o nación. Se trata de una comunidad humana que comparte una afinidad cultural que permite que sus integrantes puedan sentirse identificados entre sí. Más allá de la historia compartida, los miembros mantienen en el presente prácticas culturales y comportamientos sociales similares.
Por lo general, las comunidades que forman una etnia reclaman un territorio propio y una estructura política a fin con sus necesidades sociales. De todas maneras, existen Estados nacionales que son multiétnicos: lo importante es que, en cualquier caso, se respeten los derechos de las minorías.
Pese a que la noción de etnia suele ser asociada al concepto de raza, ambas palabras no hacen referencia a lo mismo. La etnia incluye factores culturales, como las tradiciones, la lengua y las creencias religiosas. La raza, en cambio, señala las características morfológicas de un grupo humano (color de piel, rasgos faciales, contextura, etc.).

Hay quienes se oponen a este tipo de clasificaciones de etnia o raza ya que suelen promover las agresiones y la violencia. El hecho de identificarse como parte de un grupo social puede llevar a una persona a una exacerbada defensa de su particularidad y a entrar en conflicto con los integrantes de otros grupos. Esta situación, que incluso puede ser incentivada por la política, termina por atentar con la idea de comunidad internacional. La gente pierde conciencia de su pertenencia a la especie humana y circunscribe su sentido de pertenencia a su etnia.


DIFERENCIA ENTRE ETNIA Y RAZA

Estos dos conceptos normalmente suelen confundirse o utilizarse sin comprender las diferencias que entre ellos existen. Sin embargo, pese a ser ambos términos que sirven para caracterizar una sociedad, lo hacen desde perspectivas diversas.
Mientras que una etnia hace referencia a los aspectos culturales de un pueblo, los cuales se encuentran sumamente ligados a una historia; la raza engloba los rasgos físicos y biológicos que son representativos del mismo.

En una etnia confluyen una serie de prácticas culturales, lingüísticas, religiosas y de comportamiento enmarcadas en una estructura social, política y, aunque no es imprescindible, territorial.
En las categorías raciales se incluyen aquellos aspectos biológicos más visibles, como la pigmentación de la piel y ciertos rasgos faciales dominantes en todos los individuos que forman parte del grupo.

Una raza es una subdivisión que se hace dentro de una especie y que sirve para identificar con claridad los grupos que claramente se diferencian del resto por contar con una serie de características. A diferencia de la etnia, que sirve para hablar únicamente de grupos humanos, la raza se utiliza en todas las especies de origen animal, incluida la nuestra.

Los individuos que pertenecen a una misma etnia comparten una ascendencia común. En general sienten una unión con el resto que forman parte de la misma que los lleva a unirse entre sí para vivir ya sea en el mismo territorio donde la etnia tiene el poder de hegemonía, como en aquellos lugares donde son minoría. Por ejemplo, los españoles que se exiliaron a diversos países durante la guerra civil, formaron comunidades hispanas en estos, para reforzar su identidad y sentirse menos solos.
Es necesario agregar que en torno al concepto de raza existe una fuerte polémica. Algunos científicos aseguran que este concepto no debería utilizarse para hablar de los seres humanos ya que las diferencias genéticas que existe entre ellos es mínima. Esta corriente de pensamiento intenta luchar contra esa concepción racista que gira en torno al término y que lleva a un uso indebido del mismo.
Por último, cabe mencionar que una especie se encuentra formada por el conjunto de individuos que forman parte de un mismo grupo porque poseen semejanzas genéticas, pero que entre sí pueden presentar diferencias biológicas o étnicas, en el caso de los humanos.

PAISAJE HISTÓRICO
Se entiende por paisaje urbano histórico la zona urbana resultante de una estratificación histórica de valores y atributos culturales y naturales, lo que trasciende la noción de “conjunto” o “centro histórico" para abarcar el contexto urbano general y su entorno geográfico.
Este contexto general incluye otros rasgos del sitio, principalmente su topografía, geomorfología, hidrología y características naturales; su medio urbanizado, tanto histórico como contemporáneo; sus infraestructuras, tanto superficiales como subterráneas; sus espacios abiertos y jardines, la configuración de los usos del suelo y su organización espacial; las percepciones y relaciones visuales; y todos los demás elementos de la estructura urbana. También incluye los usos y valores sociales y culturales, los procesos económicos y los aspectos inmateriales del patrimonio en su relación con la diversidad y la identidad.
Esta definición sienta las bases de un planteamiento global e integrado para la determinación, evaluación, conservación y gestión de los paisajes urbanos históricos como parte de un plan general de desarrollo sostenible.
La noción de “paisaje urbano histórico” responde al objetivo de preservar la calidad del medio en el que viven las personas, mejorando la utilización productiva y sostenible de los espacios urbanos, sin perder de vista su carácter dinámico, y promoviendo la diversidad social y funcional. En ella confluyen los objetivos de la conservación del patrimonio urbano y los del desarrollo social y económico. Es un planteamiento basado en una relación equilibrada y sostenible entre el medio urbano y el medio natural, entre las necesidades de las generaciones presentes y venideras y la herencia del pasado.

Partiendo de la base de que la diversidad y la creatividad culturales son bazas importantísimas para el desarrollo humano, social y económico, la noción de paisaje urbano histórico ofrece herramientas para la gestión de las transformaciones físicas y sociales y procura que las intervenciones contemporáneas se integren armónicamente con el patrimonio en un entorno histórico y tengan en cuenta el contexto regional.

La noción de paisaje urbano histórico tiene en cuenta las tradiciones y percepciones de las comunidades locales a la vez que respeta los valores de la comunidad nacional e internacional.

CONSTRUCCIÓN SOCIAL
La construcción social hace referencia a que los fenómenos sociales ocurren en el ámbito de una sociedad determinada y son aceptados como naturales a ella; pero sin embargo son producto de esa cultura, como invención de la misma, que lleva a quienes la integran a tener una mirada de la realidad similar a quienes comparten esa cultura que aparece como incuestionable, aunque éticamente no habría inconvenientes de que no fuera así. Tanto es así que esas interpretaciones de la realidad van cambiando y eso permite que las ideas, creencias y las instituciones que de ella se derivan puedan también ir modificándose.

El sociólogo francés, nacido en 1930, Pierre Bourdieu, basándose en el aporte de Durkheim, se preocupó de estudiar las estructuras sociales que se les imponen a los individuos desde fuera de sí mismos, debiendo analizarse en el actuar humano y en su pensamiento como éstos están condicionados por lo que la sociedad les enseña. Sin embargo reconoce que el actuar de las subjetividades de sus miembros hace que la sociedad pueda cambiar esas estructuras para crear otras nuevas, cuando entran en contradicción con nuevas ideas compartidas, igualmente condicionantes.

LA IDENTIDAD UNIFICA Y CONSTRUYE
El sentimiento de pertenencia a una cultura determinada, construido a través de la adopción e internalización de elementos culturales comunes a dicho grupo humano, que permite marcar diferencias al relacionarse con otros individuos.
La identidad cultural es el proceso dinámico a partir del cual las personas que comparten una cultura se autodefinen y autovaloran como pertenecientes a ella, además actúan de acuerdo a unas pautas culturales que de ellas mismas emanan, implicando la definición que las demás culturas tienen respecto a ellas.